Sabemos que el cambio climático está provocando un aumento de temperaturas a nivel global. Esto está afectando a diversos ecosistemas y a las especies que habitan en ellos. Uno ecosistemas afectados por el cambio climático cercano a nosotros es el mar Mediterráneo. La temperatura del Mediterráneo está alcanzando límites que nunca antes se había registrado. Todo esto conlleva graves consecuencias para el equilibrio natural del ecosistema.
En este artículo vamos a contarte cómo afecta al cambio climático a la temperatura del Mediterráneo y qué consecuencias tiene.
Temperatura del Mediterráneo
Se ha vuelto común hablar de olas de calor y, recientemente, incluso hemos comenzado a incorporar el término «olas de calor marinas» a nuestro vocabulario. Durante el verano de 2022, el Mediterráneo experimentó uno de esos fenómenos, que tuvo efectos perjudiciales en los ecosistemas y procesos marinos. Las estadísticas actuales demuestran que la temperatura del Mediterráneo está aumentando.
Una ola de calor marina es un fenómeno que ocurre cuando la temperatura del agua superficial del océano aumenta por encima del promedio estacional durante un período prolongado.
La definición de olas de calor marinas, establecida por los investigadores, se refiere a la duración y el grado de aumento de la temperatura en determinadas zonas del océano. Específicamente, cuando las temperaturas en estas regiones exceden el 10% de los valores registrados para esa época particular del año y persisten durante un mínimo de cinco días consecutivos, se considera una ola de calor marina.
Las olas de calor en el océano, conocidas como olas de calor marinas, pueden abarcar grandes distancias de miles de kilómetros y persistir durante varios meses. Se pueden clasificar en cuatro categorías diferentes según su intensidad, siendo los cuatro niveles de clasificación extremo, severo, fuerte y moderado.
Los expertos han identificado cuatro factores clave que contribuyen a la formación de las olas de calor del mar. Estos factores incluyen la transferencia de calor del aire al océano, alteraciones en los patrones de viento que pueden resultar en surgencias, cambios en las corrientes oceánicas y eventos como El Niño, que provoca un calentamiento inusual de las aguas ubicadas en la región del Pacífico ecuatorial.
La evidencia es clara e incontrovertible: la temperatura del mar Mediterráneo continúa aumentando de manera constante y sin cesar.
Cambio climático y temperatura del Mediterráneo
La última publicación del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo, CEAM, presenta los últimos datos sobre la temperatura de la superficie del mar en la cuenca mediterránea. El propósito de estos estudios es monitorear periódicamente las tendencias y cambios en la temperatura de la superficie, ya que sirve como un indicador confiable del cambio climático.
Durante el verano de 2022, el Mediterráneo vivió una ola de calor marina que provocó un aumento significativo de las temperaturas, superando la media en más de 6ºC en determinadas zonas. Según los datos disponibles, esta ola de calor marina duró hasta el otoño. Sin embargo, el informe destaca que estas temperaturas inusualmente altas persistieron hasta la temporada de invierno.
En los últimos meses, la región mediterránea ha experimentado un descenso de su temperatura superficial típica. Sin embargo, las temperaturas se mantuvieron por encima de su media en febrero de 2023 según lo informado por los datos meteorológicos.
Es importante tener en cuenta que la mayor parte, o el 90%, de la energía producida por los gases de efecto invernadero es absorbida por los océanos, lo que provoca un aumento de la temperatura. El Mar Mediterráneo, en particular, está experimentando una tendencia de calentamiento que es un 20% más rápida que el aumento global medio que afecta a otros océanos y mares.
La región mediterránea experimentó una temporada invernal inusualmente suave, caracterizada por temperaturas más altas que la media.
Patrón de temperaturas
Es evidente que ha habido un patrón discernible en el aumento de las temperaturas. Según datos recogidos desde 1982, el Mediterráneo ha experimentado un aumento medio de 1,5ºC. Además, los meses de invierno de diciembre, enero y febrero han experimentado algunas de las desviaciones mensuales más significativas en la temperatura de la superficie.
En diciembre de 2022, la anomalía de la temperatura media en superficie, ajustada por cambios estacionales, se registró en 1,6ºC. El mes siguiente, en enero, aumentó ligeramente hasta los 1,7ºC. En febrero, la anomalía de temperatura había aumentado aún más hasta 1,8ºC, más del doble del valor registrado en la serie de datos históricos de ese mes.
Además del CEAM, el Boletín Oficial del Sistema de Observación de las Islas Baleares también muestra la evolución de la temperatura media superficial del Mediterráneo. A partir del 13 de abril, los datos destacaban un aumento significativo de la temperatura superficial, alcanzando un pico de 16,75ºC. Este valor es superior a la media y también supera el percentil 90.
Según los registros oficiales, no es de extrañar que las aguas superficiales del mar Balear estuvieran por encima de la media durante el 94% de los días de 2022. El 11 de agosto, la zona incluso alcanzó su máximo histórico, con una temperatura media de 29,3ºC.
Posibles consecuencias
Según un informe del Instituto Español de Oceanografía, se descubrió que entre 1948 y 1970 se produjo un descenso tanto de la temperatura del aire como de la superficie del mar. Por el contrario, desde mediados de la década de 1970 hasta la actualidad, ha habido un repunte en las tendencias de temperatura.
Entre los años 1948 y 2005, el aumento de la temperatura de la superficie del mar a lo largo de la costa mediterránea de España osciló entre 0,12º C y 0,5º C de media.
Según un informe de WWF, el mar Mediterráneo se está calentando a un ritmo un 20% más rápido que la tasa media de calentamiento global de otras masas de agua. Si bien un aumento de 1,5ºC puede no parecer significativo a primera vista, cabe señalar que las consecuencias resultantes podrían ser sustanciales, especialmente si persiste la tendencia al calentamiento.
A medida que aumenta la temperatura del Mediterráneo, existe la posibilidad de que la región esté atravesando un proceso de tropicalización. Desafortunadamente, el aumento de temperatura también provoca la pérdida de especies autóctonas, ya que son desplazadas por las llamadas especies invasoras.
Las consecuencias de tales acciones no sólo tienen un impacto en la vida vegetal y animal circundante, sino que también se extienden al clima de la región, provocando alteraciones en la distribución de las precipitaciones y la posibilidad de que se produzcan fenómenos meteorológicos graves.
La influencia del aumento de las temperaturas no se limita al mar Mediterráneo; tiene un impacto global en todos los océanos y mares. En abril de este año, la temperatura media de la superficie de los océanos del mundo aumentó a 21,1ºC. Los efectos del fenómeno de El Niño sobre esta tendencia aún están por determinar.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre cómo afecta el cambio climático a la temperatura del Mediterráneo.