Cuando Júpiter estaba en sus primeras etapas, potencialmente tenía una forma plana, lo que presenta nuevos conocimientos sobre la formación de planetas y la amplia gama de sistemas estelares que existen en todo el universo. Ante esto, surge la pregunta: ¿cuál fue la apariencia de Júpiter durante su juventud?
En este artículo vamos a contarte todo lo que necesita saber sobre cómo Júpiter pudo haber sido plano.
Características de Júpiter
Con un diámetro de aproximadamente 140.000 kilómetros, Júpiter reina como el planeta más colosal y masivo del sistema solar. Júpiter, con una masa de aproximadamente 1.900 mil millones de toneladas, tiene aproximadamente 11 veces el tamaño de la Tierra y 318 veces su peso. Al igual que el Sol, Júpiter está compuesto principalmente de hidrógeno y helio.
La atmósfera se caracteriza por su densidad y turbulencia, con nubes vibrantes y tormentas masivas que recuerdan a la Gran Mancha Roja. Júpiter, un cuerpo celeste que carece de superficie sólida, está formado por varias capas de gas, líquido y metal que envuelven un núcleo rocoso. Además, este planeta posee un robusto campo magnético que produce impresionantes auroras polares.
Júpiter, el cuerpo celeste que tiene potencial para convertirse en estrella, alberga un conjunto de 79 lunas, algunas de las cuales tienen gran importancia en el campo de la astrobiología. Lunas como Europa y Encelado son particularmente cautivadoras por su potencial para la vida extraterrestre.
Júpiter, con su inmenso tamaño, ha llevado a algunos astrónomos a clasificarlo como una estrella fallida, es decir, no se encendió como el Sol debido a su masa insuficiente. La estimación general es que un objeto debe cumplir ciertos criterios para convertirse en una estrella.
Para desencadenar reacciones de fusión nuclear en su núcleo, un cuerpo celeste debe tener una masa no inferior al 8% de la del Sol, lo que se traduce en aproximadamente 80 veces la masa de Júpiter. Si Júpiter hubiera cumplido este criterio, habría iniciado el proceso de fusión nuclear, lo que habría resultado en la liberación de una cantidad significativa de energía.
Júpiter pudo haber sido una estrella
Júpiter, a pesar de estar bastante alejado de dicho umbral, emite sólo una modesta cantidad de energía y luz. Aunque no es una estrella, ejerce una fuerza gravitacional significativa sobre el sistema solar, que se genera en parte por su contracción gravitacional y la desintegración radiactiva de los elementos. Este calor residual juega un papel crucial en la influencia de Júpiter en el sistema solar.
Este planeta es un cuerpo celeste capaz de alterar las trayectorias de planetas, asteroides y cometas vecinos, posee la capacidad de redirigir o atrapar cualquier objeto que se acerque. Como la mayoría de los planetas, Júpiter posee una forma esférica, aunque no siempre ha mantenido esta forma, según una hipótesis recientes.
De acuerdo con la propuesta de dos astrofísicos de la Universidad de Central Lancashire, Júpiter inicialmente tomó la forma de un disco que giraba rápidamente, parecido a la planitud de una tortita o a la redondez de un caramelo M&M o Rocklets.
Júpiter pudo haber sido plano
La formación de Júpiter puede atribuirse a un fenómeno conocido como inestabilidad del disco. Durante este proceso, el disco de gas y polvo que rodea a una estrella joven se rompe en fragmentos más pequeños debido a las fuerzas gravitacionales. Estos fragmentos luego se juntan y se condensan, formando finalmente planetas. En el caso de Júpiter, su distancia de la estrella y su rápida rotación dan como resultado su distintiva forma oblonga.
Después de realizar su investigación, los científicos determinaron que a medida que se aspira más material, comienza a formar una forma redondeada. Simulaciones por ordenador de naturaleza intrincada revelan la trayectoria evolutiva de estos cuerpos celestes aplanados. Entre ellos, Júpiter destaca como un excelente ejemplo, pasando de una forma plana a una forma más esférica.
El concepto de que Júpiter inicialmente tenía una forma plana tiene implicaciones importantes para comprender el desarrollo y la evolución de los planetas gigantes gaseosos. En concreto, indica que estos planetas experimentan un proceso de formación más rápido a mayores distancias de su origen.
La información recién descubierta sobre la estrella sugiere que puede haber más en su estructura de lo que se creía inicialmente. Este hallazgo podría proporcionar una explicación para la presencia de ciertos exoplanetas que desafían la comprensión convencional de cómo se forman los planetas. Por el contrario, también indica que los planetas aplanados poseen características únicas.
Los planetas que se desvían de una forma esférica exhiben características distintas, que incluyen un área de superficie aumentada, densidad reducida, temperatura elevada y luminosidad mejorada. Estos atributos únicos facilitan la identificación y el examen de dichos cuerpos celestes, tanto dentro como fuera de nuestro propio sistema solar.
Si Júpiter y sus contrapartes planas no logran reunir suficiente material para lograr una forma redondeada, pueden permanecer aplanados durante un período prolongado, o incluso indefinidamente. Es importante señalar que Júpiter no es el único planeta que pudo haber experimentado una fase plana en su pasado. Esta idea proviene de astrofísicos que han estudiado las formaciones planetarias.
Se ha teorizado que no sólo Júpiter, sino también otros planetas gigantes gaseosos como Saturno, Urano y Neptuno, inicialmente adquirieron una forma alargada como resultado de la inestabilidad del disco durante su formación. Además, estos planetas han logrado mantener esta forma durante toda su existencia.
El nivel de aplanamiento que presenta un planeta está determinado por una medida específica conocida como aplanamiento. Esta medida se calcula restando el diámetro polar al diámetro ecuatorial. En el caso de Júpiter, su achatamiento se registra como 0,06487, lo que indica eso.
El diámetro polar de Urano es 0,09796, mientras que su diámetro ecuatorial es un 6,487% mayor. Lo mismo se aplica a Saturno. Los valores de Urano y Neptuno, 0,02293 y 0,01708 respectivamente, superan con creces los de los planetas terrestres.
Júpiter y sus homólogos planos poseen un nivel notablemente mínimo de aplanamiento, que mide menos de 0,01. Gracias a los avances en la tecnología y la ciencia, ahora podemos aplicar la teoría de que Júpiter es plano no solo a los planetas dentro de nuestro sistema solar sino también a los exoplanetas, que son planetas que orbitan alrededor de estrellas distintas a la nuestra.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre qué júpiter pudo haber sido plano y todo lo que ser investigado alrededor de esto.