El calendario es una de las pruebas del concepto de tiempo social. Analizándolo podemos obtener información sobre otras características de la sociedad. La relación entre las creencias populares y las creencias cristianas, la estructura social, los conceptos de la vida humana, etc. Se han venido reflejando en un calendario artístico o literario que muestra estas características, así como expresiones verbales a las que llamamos refranes. Hoy vamos a hablar del calendario medieval.
En este artículo vamos a contarte todo lo que debes saber sobre la historia, importancia y cómo se puede ver el calendario medieval.
Historia del calendario medieval
Durante la Edad Media, los calendarios utilizados en los documentos medievales en los países cristianos de la Península Ibérica eran diferentes a los calendarios que utilizamos actualmente. Por un lado, el calendario está marcado principalmente por la era española, aunque pronto veremos otros modelos. Por otro lado, la fecha y el día del mes siguen el calendario romano y la hora del día sigue la hora normal utilizada en el monasterio.
Este método de datación parece haber sido utilizado en la Península Ibérica desde el siglo III, y fue ampliamente promovido en los visigodos y la Alta Edad Media. En general se cree que su origen se refiere a los hispanos que fueron asentados por los romanos. Según este punto de vista, ocurrió en el año 38 a.C, es decir, en el 716 cuando se fundó la ciudad de Roma, aunque sabemos que no fue así. Realmente sucedió hasta el final de las guerras Cántabras en el 19 a.C.
Por lo tanto, si tenemos un documento fechado según la época hispana, hay que restar 38 años y obtendremos el año correspondiente al calendario actual. Por ejemplo, si un documento está datado en la era 1045, entonces para calcular el año según nuestro calendario: 1045 – 38 = 1007, es decir se corresponde al año 1007 de nuestro calendario.
Era cristiana
En el año 532 el monje Dionisio el Exiguo calculó la fecha en la que habría nacido Jesucristo: el 25 de diciembre del año 752 de la fundación de Roma. En consecuencia de este evento tan extraordinario se estableció que tras el 31 de diciembre del año 752 desde la fundación de Roma le siguiera el 1 de enero del año 1 de la era cristiana. A día de hoy se desconoce el cálculo exacto que utilizó Dionisio para poder llegar a esta conclusión del calendario. Al final acabó siendo erróneo entre una diferencia de 4-7 años. Sin embargo, desde su elaboración, ha servido para el cómputo de nuestros años.
También he que tener en cuenta que no se contempló un año 0. Es entonces cuando comenzaron a utilizar la abreviatura AD que significaba anno domini o año del Señor. Existen varios modos de utilización de la datación de la era cristiana dependiendo del día que se elige para que comience el año. Vamos a ver cuáles son los diferentes tipos que existen:
- Año de la Circuncisión: comienza el año el día 1 de enero y es el modo que utilizamos actualmente. También se empleaba para comenzar el año civil romano. Es un tipo de año utilizado por los reyes merovingios en el siglo VIII. Tal fue la repercusión que se pudo difundir por el resto de Europa a partir del siglo XIII. La llegada a España y su oficialidad comenzó en el siglo XVI.
- Año de la Encarnación: aquí el año comienza el 25 de marzo, cuando la Virgen María concibió a Jesús, es decir, nueve meses antes del nacimiento de Cristo.
El año de Encarnación se puede datar de dos formas diferentes. Por un lado, tenemos el cómputo pisano que se emplea en Pisa y Siena entre otras ciudades de la Toscana italiana. Para poder trasladar a otro calendario bastará con restar un año a la fecha si ésta se encuentra entre el 25 de marzo y el 31 de diciembre y se mantiene igual siempre que esté en el otro intervalo.
Por otro lado, tenemos el cómputo florentino. Aquí comienza el año el 25 de marzo pero después de que la virgen María concibiera a Jesucristo. Luego si la fecha florentina está entre los días 1 de enero y 24 de marzo se le ha de sumar un año para traspasarlo a nuestro cómputo. Si la fecha florentina está entre el 25 de marzo y el 31 de diciembre se mantiene igual. Se empleó en la Corona de Aragón hasta el reinado de Pedro IV.
Calendario medieval: otros años
Hay otros tipos de años dentro del calendario medieval. Vamos a ver cuáles son:
- Año de la natividad: el año comienza el día del nacimiento de Cristo que fue el 25 de diciembre. Se empleó principalmente en los estados italianos y en otros países del siglo IX. Se estableció como oficial en Aragón el año 1350. En este caso, si la fecha estaba entre el 25 de diciembre y el 31 de diciembre, habría que restar un año a dicha fecha. El resto de los días coinciden.
- Año de la resurrección: es el último tipo de año que existe dentro del calendario medieval. Es el más complicado de traspasar a nuestro calendario puesto que domingo de pascua no tiene un día fijo. Depende del calendario lunar y de cuando se fija la celebración de la Semana Santa.
Meses del año
Del calendario medieval se extraen los meses del año encontrados en los documentos fechados en la alta edad media. Si en el calendario romano tras la reforma Juliana que divide el año en 12 meses, tal y como lo conocemos en la actualidad. Vamos a ver cuáles son los meses del calendario medieval:
- Enero: su nombre procede de la palabra puerta y está relacionada con el Dios Jano. Esto es debido a que es el mes que encabeza el año.
- Febrero: proceden del nombre februa que significa fiestas de purificación. Debemos tener en cuenta que en el calendario juliano eran bisiestos todos los años divisibles por 4, mientras que en el nuestro es cada 4 años.
- Marzo: es un mes dedicado al Dios de la guerra.
- Abril: el nombre del origen es incierto.
- Mayo: el nombre puede provenir de la diosa romana Maia cuyo festival celebraban los romanos durante ese mes.
- Junio: el nombre del mes proviene del fundador de la república romana.
- Julio: es un nombre en honor a Julio César que nadie ácido este mes.
- Agosto: 3030 30 activamente en ha denominado como Sextilis, pero a partir del año 8 a.C se denominó augustus el olor del emperador Augusto.
- Septiembre: Se llama así por ser el mes séptimo desde marzo
- Octubre: Antiguamente era el octavo mes desde marzo.
- Noviembre: Antiguamente el mes noveno desde marzo
- Diciembre: Antiguamente el mes décimo desde marzo
Espero que con esta información puedan conocer más sobre el calendario medieval y su historia.