Así, en un abrir y cerrar de ojos, nos encontramos en septiembre, un mes en el que en el cielo empieza a haber actividad interesante. En efecto: es en este mes cuando caen las primeras lluvias intensas tras haber pasado un verano caluroso y muy seco en varios puntos de la Península Ibérica y en los archipiélagos balear y canario.
Podríamos decir del noveno mes del año que supone una transición entre dos estaciones: la del verano que llegará a su fin hacia la penúltima semana, y la del invierno que poco a poco se va acercando. Los días se acortan, mientras que las noches por el contrario se alargan. Y, con todo, gracias a los refranes de septiembre podemos hacernos una idea de qué nos depara este mes.
Septiembre es un mes en el que, muchas veces, se disfruta estando en el exterior. Las temperaturas, tanto máximas como mínimas, suelen empezar a descender, por lo que conciliar el sueño por las noches es cada vez más sencillo. Aunque claro, esto no siempre es así. De hecho, puede ocurrir justo lo contrario, que se prolongue el verano y que además lo haga de tal modo que el mercurio del termómetro suba a valores inusuales, tal y como ocurrió en el 2016, cuando se produjo una ola de calor anómala.
¿Qué temperaturas suele haber durante este mes en España?
Según datos de la AEMET, la temperatura media es de 20,6 grados centígrados, aunque en el sur de Andalucía y en Murcia suele haber días muy calurosos, con valores que se sitúan ligeramente por encima de los 30ºC. Sin ir más lejos, en el 2015, el día 22 se registraron 36’2ºC en el observatorio de Murcia-Alcantarilla, y 36ºC en Murcia y en Málaga-Aeropuerto.
Si hablamos de mínimas, éstas son bajas o muy bajas en la mitad norte peninsular, especialmente en los sistemas montañosos, donde los valores se sitúan sobre los 5ºC, o menos. Tanto es así que en septiembre del 2015 hubo tan sólo 1ºC de mínima en el Puerto de Navacerrada el día 17, y 1,3ºC en Molina de Aragón el día siguiente.
Y, ¿cómo son las precipitaciones?
Como siempre, según datos de la AEMET, la precipitación media sobre España es de 42mm. Pero como suele ocurrir, las lluvias no tiene una distribución geográfica muy regular; es decir, que puede llover mucho en el noroeste peninsular, y no caer más que unas cuantas gotas hacia el este. Sin embargo, la situación fue muy curiosa en septiembre del año pasado: en el sureste, en Baleares y en gran parte de las Islas Canarias el mes tuvo un carácter húmedo o muy húmedo, mientras que en el resto fue más bien seco.
Así pues, estamos en un mes que nos puede deparar muchas sorpresas. Veamos qué dicen los refranes.
Refranes de septiembre
- Marzo y Septiembre son tal cual hermanos: uno dice adiós al invierno y otro al verano: la primavera astronómica comienza el 21 de marzo, que es cuando el sol está en la constelación Aries, y el otoño astronómico lo hace el 23 de septiembre, que es cuando el sol está en la de Libra.
- En septiembre a fin de mes, el calor vuelve otra vez: durante la última decena del mes las temperaturas se recuperan un poco. A este periodo se le conoce como el veranillo de San Miguel.
- Septiembre es frutero, alegre y festero: durante este mes se cosechan los últimos frutos de las plantas hortícolas, tales como los de la higuera o los del melocotón. Además, el ambiente más suave invita a salir a la calle, por lo que es cuando se celebran las fiestas en muchos pueblos.
- Por el veranillo de San Miguel están los frutos como la miel: San Miguel es el día 29 de septiembre, aunque en la actualidad es la festividad de los Arcángeles. Normalmente es un día durante el cual el cielo está despejado y se pueden disfrutar de los últimos restos del verano.
- Cuando la Virgen llega, la golondrina se va: el 8 de septiembre, que se celebra el Nacimiento de la Virgen, es un día en el que las temperaturas empiezan a refrescar, por lo que las golondrinas emigran hacia África.
- Septiembre se tiemble, pues o seca las fuentes o se lleva los puentes: es propio de las costas mediterráneas. Después de una temporada que puede ser más o menos larga de sequía, las lluvias suelen caer de forma torrencial, de manera que se pueden producir riadas importantes.
- Por San Mateo, tanto veo como no veo: la festividad de San Mateo es el 21 y el equinoccio el 23. Ambos tienen la misma duración: amanece a las 6 de la mañana y anoche a las 6 de la tarde.
- Si en septiembre comienza a llover, otoño seguro es: con las lluvias, el ambiente se suaviza. Los ríos vuelven a recuperar el agua perdida durante la temporada veraniega, que termina.
¿Conoces otro refrán de septiembre?