¿Qué diferencia hay entre un anticiclón y una borrasca?

anticiclón y borrasca

Diferencia entre anticiclón (A) y borrasca (B)

Las borrascas y los anticiclones, hacen referencia a las diferentes presiones de la atmósfera. La presión atmosférica se mide en milibares (mbar). Un milibar es igual a la milésima parte de 1 bar, y un bar es igual a 1 atmósfera (atm). Es importante saber que significa un milibar, ya que la diferencia de más o menos milibares en una región crea las borrascas y los anticiclones.

Antes de entrar en detalles, los anticiclones y las borrascas son fácilmente identificables en un mapa teniendo en cuenta las isobaras. Si hay más presión de lo normal, por ejemplo 1024 mb, es cuando hablamos de un anticiclón. Cuando la presión es baja, por ejemplo 996 milibares, tal cómo sale en la imagen, hablamos de una borrasca. A partir de aquí, el clima que se asocia a las diferentes presiones es distinto.

El anticiclón

cielo despejado paisaje

Usualmente podríamos compararlo con el tiempo estable, de cielo despejado y con Sol. Su presión se encuentra aproximadamente a partir de 1016 milibares o más.

El aire de un anticiclón es más estable que el aire que le circunda. A su vez el aire desciende hacia abajo desde la atmósfera, produciendo el fenómeno conocido como «subsidencia». La subsidencia como tal, impide la formación de precipitaciones. La forma en como desciende el aire, varía según el hemisferio donde nos encontremos. En el hemisferio norte, desciende en forma de remolino en el sentido de las agujas del reloj. Y en el hemisferio sur, al contrario.

Borrasca

nubes tormenta

Contraria al anticiclón, se relaciona con tiempo inestable, cielos nubosos y precipitaciones. Su presión es inferior a los 1016 milibares.

El sentido de giro del aire en la borrasca, que en este caso sube hacia arriba, lo hace en sentido contrario al anticiclón. Es decir, en el sentido de las manecillas del reloj en el hemisferio sur y al revés para el hemisferio norte.

Suelen traer vientos, y a minimizar la temperatura, tanto en verano como en invierno. Suele ocurrir por la entrada de menos rayos solares, pues las nubes los reflejan impidiéndoles pasar.


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