Lo primero que debes saber es que es la biomasa no es más que materia orgánica de origen vegetal o animal, aquĂ se incluyen los residuos y desechos orgánicos, que es susceptible de ser aprovechada para producir energĂa.
La razĂłn es debida a que las plantas transforman la energĂa radiante del Sol en energĂa quĂmica a travĂ©s de la fotosĂntesis y parte de esta energĂa queda almacenada en forma de materia orgánica, la cual podemos aprovechar.
Actualmente, es aceptada la siguiente definiciĂłn de biomasa:
“Se considera biomasa a un grupo de productos energĂ©ticos y materia primas de tipo renovable que se originan a partir de materia orgánica formada por vĂa biolĂłgica “.
Es por esta razĂłn que el concepto de combustibles fĂłsiles y las materias orgánicas derivadas de Ă©stos como son los plásticos y la mayorĂa de los productos sintĂ©ticos se encuentra fuera de lugar en la definiciĂłn de biomasa.
Aunque dichos combustibles y materiales orgánicas derivadas tuvieron un origen biológico, su formación tuvo lugar en tiempos pasados.
La biomasa es por tanto, una energĂa renovable de origen solar a travĂ©s de la fotosĂntesis de los vegetales.

Además, según la Directiva 2003/30/CE biomasa es:
“Fracción biodegradable de productos de desecho y residuos procedentes de la agricultura, silvicultura y de las industrias relacionadas, asà como de la fracción biodegradable de residuos industriales y municipales”.
Por lo que nos damos cuenta es que de forma general, cualquier definición de biomasa engloba 2 términos principalmente; renovable y orgánico.
La Biomasa como fuente de energĂa
Desde tiempos remotos el hombre ha empleado la biomasa como fuente de energĂa para realizar sus tareas cotidianas.
Desde que el uso de los combustibles fĂłsiles comenzĂł a tomar fuerza, la biomasa se vio olvidada en un plano inferior, donde su aportaciĂłn a la producciĂłn de energĂa primaria era insignificante.
A dĂa de hoy, gracias a diversos factores, la biomasa ha tenido un resurgimiento como fuente de energĂa.
Los factores que han sido responsables de hacer renacer a la biomasa como fuente de energĂa son:
- El encarecimiento del precio del petrĂłleo.
- El aumento de la producciĂłn agrĂcola.
- Necesidad de buscar usos alternativos a la producciĂłn agrĂcola.
- Cambio climático.
- Posibilidad de utilizar los conocimientos cientĂficos y tĂ©cnicos para optimizar el proceso de obtenciĂłn de energĂa.
- Marco econĂłmico favorable para el desarrollo de plantas que utilizan biomasa como combustible, gracias a las subvenciones a la producciĂłn que reciben las plantas generadoras de energĂa con esta fuente.
- Dificultad normativa para desarrollar otro tipo de proyectos, dejando a la biomasa como la alternativa más razonable para rentabilizar una inversión económica.
Tipos de biomasa
La biomasa destinada a la producciĂłn de energĂa se obtiene de los restos de aprovechamientos forestales, de las industrias de la primera y segunda transformaciĂłn de la madera, de la fracciĂłn orgánica de los residuos sĂłlidos urbanos, de los residuos de las explotaciones ganaderas, de los productos agrĂcolas y forestales, de cultivos energĂ©ticos, aquellos destinados exclusivamente a su explotaciĂłn para la obtenciĂłn de biomasa.
De forma general, la biomasa se obtiene de cualquier producto orgánico susceptible de aprovechamiento energético, aunque estos son los principales.

Biomasa natural
La biomasa natural es la que se produce en ecosistemas naturales. La explotaciĂłn intensiva de este recurso no es compatible con la protecciĂłn del medio ambiente, aunque sea una de las principales fuentes energĂ©ticas en los paĂses subdesarrollados.
Esta biomasa natural es creada sin intervenciĂłn alguna del hombre para modificarla o potenciarla.
Se trata fundamentalmente de residuos forestales:
- Derivados de limpieza de bosques y de restos de plantaciones
- Leñas y ramas
- ConĂferas
- Frondosas
Biomasa residual
La biomasa residual es la que generada en las actividades humanas que utilizan materia orgánica. Su eliminación en muchos casos supone un problema. Este tipo de biomasa tiene asociadas unas ventajas en su utilización:
- Reduce la contaminaciĂłn y riesgos de incendios.
- Reduce el espacio en vertederos.
- Los costes de producciĂłn pueden ser bajos.
- Los costes de transporte pueden ser bajos.
- Evita emisiones de CO2.
- Genera puestos de trabajo.
- Contribuye al desarrollo rural.
La biomasa residual se divide a su vez en una serie de categorĂas que se mencionan a continuaciĂłn.
Excedentes agrĂcolas
Los excedentes agrĂcolas que no son empleados en la alimentaciĂłn humana se consideran aptos para su utilizaciĂłn como biomasa con fines energĂ©ticos.
Este uso de productos agrĂcolas usados en la cadena de alimentaciĂłn humana ha provocado una mala fama injustificada del uso de la biomasa con fines energĂ©ticos, al haberse acusado a este uso de una subida del coste de determinados productos agrĂcolas que son la base de la alimentaciĂłn en muchos paĂses del tercer mundo y en vĂas de desarrollo.
Estos excedentes agrĂcolas pueden ser utilizados tanto como combustible en plantas de generaciĂłn elĂ©ctrica como transformados en biocombustibles. Para más informaciĂłn sobre este tema puedes consultar el artĂculo sobre biocombustibles.
Cultivos energéticos
Los cultivos energĂ©ticos antes mencionados son cultivos especĂficos dedicados exclusivamente a la producciĂłn de energĂa.
A diferencia de los agrĂcolas tradicionales, tienen como caracterĂsticas principales su gran productividad de biomasa y su elevada rusticidad, expresada en caracterĂsticas tales como resistencia a la sequĂa, a las enfermedades, vigor, precocidad de crecimiento, capacidad de rebrote y adaptaciĂłn a terrenos marginales.
Entre los cultivos energéticos se pueden incluir cultivos tradicionales (cereales, caña de azúcar, semillas oleaginosas) y otros no convencionales (cynara, pataca, sorgo dulce) que están siendo objeto de numerosos estudios para determinar sus necesidades de cultivo.
Procesos de transformaciĂłn de la biomasa
Como se ha visto anteriormente, la gran variedad que existe de materiales que se incluye dentro del concepto de biomasa permite a su vez establecer una variedad de posibles procesos de transformaciĂłn de esta biomasa en energĂa.
Por esta razĂłn, la biomasa puede transformarse en diferentes formas de energĂa aplicando diversos procesos de conversiĂłn, estos tipos de energĂa son:
Calor y vapor
Es posible generar calor y vapor mediante la combustión de biomasa o biogás.
El calor puede ser el producto principal para aplicaciones en calefacciĂłn y cocciĂłn, o puede ser un subproducto de la generaciĂłn de electricidad en plantas que cogeneran electricidad y vapor.
Combustible gaseoso
El biogás producido en procesos de digestiĂłn anaerĂłbica o gasificaciĂłn puede ser usado en motores de combustiĂłn interna para generaciĂłn elĂ©ctrica, para calefacciĂłn y acondicionamiento en el sector domĂ©stico, comercial e institucional y en vehĂculos modificados. El uso de biogás está en auge, y resulta esencial para entender el avance en la energĂa alternativa.
Biocombustibles
La producciĂłn de biocombustibles como el etanol y el biodiesel (puedes echar un vistazo al artĂculo CĂłmo hacer biosiesel casero) tiene el potencial para reemplazar cantidades significativas de combustibles fĂłsiles en muchas aplicaciones de transporte.
El uso extensivo de etanol en Brasil ha demostrado, durante más de 20 años, que los biocombustibles son técnicamente factibles a gran escala.
En los Estados Unidos y Europa su producción está incrementándose y se están comercializando mezclados con derivados del petróleo.
Por ejemplo, la mezcla denominada E20, constituida 20% de etanol y 80% de petrĂłleo, resulta aplicable en la mayorĂa de motores de igniciĂłn.
Actualmente, este tipo de combustible recibe algĂşn tipo de subvenciĂłn o ayuda estatal, pero, en el futuro, con el incremento en los cultivos energĂ©ticos y las economĂas de escala, la reducciĂłn de costos puede hacer competitiva su producciĂłn.
Electricidad
La electricidad generada a partir de la biomasa puede ser comercializada como “energĂa verde”, pues no contribuye al efecto invernadero por estar libre de emisiones de diĂłxido de carbono (CO2).
Este tipo de energĂa puede ofrecer nuevas opciones al mercado, ya que su estructura de costos permitirá a los usuarios soportar mayores niveles de inversiĂłn en tecnologĂas eficientes, lo cual incrementará la industria bioenergĂ©tica. Además, es importante considerar el impacto ambiental de las fuentes de energĂa disponibles.
Co-generaciĂłn (calor y electricidad)
La co-generaciĂłn se refiere a la producciĂłn simultánea de vapor y electricidad, que puede aplicarse a muchos procesos industriales que requieren las dos formas de energĂa.
En América Central, por ejemplo, este proceso es muy común en la industria azucarera, donde es posible aprovechar los desechos de proceso, principalmente el bagazo.
Por la alta fiabilidad de bagazo disponible, tradicionalmente, la co-generación se realiza de una forma bastante eficiente. No obstante, en los últimos años ha existido la tendencia a mejorar el proceso para generar más electricidad y vender el excedente a la red eléctrica.
Los procesos que se pueden seguir para realizar esta transformaciĂłn pueden dividirse en fĂsicos, fĂsico-quĂmicos, termoquĂmicos y biolĂłgicos.
La combustiĂłn en plantas de biomasa
De forma sencilla, la combustiĂłn es una reacciĂłn quĂmica bastante rápida, mediante la cual se combina oxĂgeno del aire (que es el comburente) con los diferentes elementos oxidantes del combustible originándose de esta forma un desprendimiento de calor.
Por esta razĂłn, para que se produzca este proceso quĂmico deben suceder estas 4 circunstancias:
- Debe haber una cantidad suficiente de combustible, es decir, de biomasa.
- Debe hacer una cantidad suficiente de aire comburente, que contiene el oxĂgeno necesario para oxidar o reaccionar con el combustible.
- La temperatura debe ser la suficiente como para que se produzca y se mantenga la reacciĂłn. Si la temperatura no supera un determinado valor, denominado temperatura de inflamaciĂłn, comburente y combustible no reaccionan.
- Debe haber un iniciador de la combustiĂłn, normalmente una llama preexistente. Esto significa que en el encendido del sistema de combustiĂłn participan normalmente otros elementos, incluso otros combustibles.
El pretratamiento de la biomasa
La biomasa, antes de proceder a su combustiĂłn en la caldera, es necesario someterla a un proceso previo de preparaciĂłn, que facilite el proceso de reacciĂłn entre combustible y comburente.
Este proceso facilita la combustiĂłn ya que ajusta la granulometrĂa y grado de humedad, fundamentalmente.
El conjunto de procesos o tratamientos previos tienen tres objetivos fundamentales:
- Homogeneizar la entrada de biomasa en la caldera, de manera que la caldera reciba un flujo de energĂa constante y de valor similar.
- Disminuir su granulometrĂa para aumentar su superficie especĂfica.
De hecho, cuanto menor sea el tamaño del grano mayor es la superficie para que puedan reaccionar el combustible y el comburente, con lo que se produce la aceleración de la reacción y se disminuye la cantidad de biomasa que no reacciona (inquemados) - Disminuir la humedad que contiene, evitando que parte del calor liberado en la combustión se utilice como calor de vaporación del agua, disminuyendo la temperatura de los humos.
Todo ello debe hacerse además con el menor consumo de energĂa posible, ya que toda la energĂa consumida en estos procesos, a menos que sean energĂas residuales o energĂa que puedan utilizarse sin coste, supondrán una disminuciĂłn de la energĂa neta generada por la planta.
La caldera de biomasa
La caldera es sin duda el equipo principal de una central termoeléctrica de combustión de biomasa.
En ella se lleva a cabo el proceso de transformaciĂłn de la energĂa quĂmica contenida en la biomasa en energĂa tĂ©rmica, que será más tarde transformada en energĂa mecánica.
La caldera, además de ser el equipo principal, es también la principal preocupación de los técnicos que se encargan de la explotación de una central.

Es sin duda alguna, el equipo que más problemas potenciales puede dar, que más paradas provoca, y que requiere un mantenimiento más estricto.
Las razones por las que la caldera es un equipo problemático son las siguientes:
- Se trata de una tecnologĂa emergente, no suficientemente desarrollada. Frente a la gran experiencia acumulada en otros procesos de combustiĂłn que liberan gran cantidad de energĂa tĂ©rmica a partir de la oxidaciĂłn de un combustible sĂłlido, como las centrales de carbĂłn, la combustiĂłn de biomasa se enfrenta a una serie de problemas nuevos que aĂşn no se han resuelto de forma totalmente satisfactoria.
- El alto contenido en potasio y en cloro de la biomasa provoca incrustaciones y corrosiĂłn en diversas partes de la caldera.
- La combustiĂłn no es totalmente estable, presentando variaciones importantes de presiĂłn y temperatura.
- Hay una gran dificultad para automatizar completamente el control de la caldera, por la variabilidad de las condiciones en que puede presentarse la biomasa a la entrada.
- La rentabilidad de las plantas, incluso con las primas a la producción eléctrica que ofrece la legislación española, es muy ajustada, lo que obliga a ahorrar en todos los componentes, incluida la caldera. No se emplean pues los mejores materiales ni las mejores técnicas, por el incremento en el coste que suponen.
Solo una adecuada selección del tipo de caldera puede conducir a un éxito en la consecución de un proyecto de generación eléctrica con biomasa, y a la vez, una elección inadecuada dificultará enormemente que una inversión en este tipo de plantas, que supone entre 1 y 3 millones de euros por MW de potencia eléctrica instalada, pueda rentabilizarse.
Centrales termoeléctricas de biomasa
Una central termoelĂ©ctrica de biomasa es una planta de generaciĂłn elĂ©ctrica que aprovecha la energĂa quĂmica contenida en una cantidad determinada de biomasa y que es liberada como energĂa tĂ©rmica mediante un proceso de combustiĂłn.
En primer lugar, una planta de valorización energética de biomasa debe disponer de un sistema de pretratamiento de biomasa, cuyos fines principales son la disminución de la humedad que contiene, la adecuación del tamaño y la uniformidad de la biomasa, al objeto de uniformizar las condiciones de entrada en la caldera y conseguir la mayor eficiencia del sistema de combustión.
Una vez liberada la energĂa tĂ©rmica en un horno apropiado, los gases liberados en la combustiĂłn, compuestos por CO2 y H2O mayoritariamente junto con otras sustancias sĂłlidas y gaseosas, intercambian su calor en una caldera por la que circula agua, y que es convertida normalmente en vapor a una determinada presiĂłn y temperatura.
Los gases de combustiĂłn de la biomasa atraviesan la caldera cediendo su energĂa al agua/vapor en diferentes etapas: paredes de agua, sobrecalentador, haz vaporizador, economizador y precalentadores de aire.
El vapor a presiĂłn formado en la caldera es transportado entonces hasta una turbina, donde se expansiona, produciĂ©ndose una nueva transformaciĂłn energĂ©tica por la cual la energĂa potencial contenida en el vapor a presiĂłn se convierte primero en energĂa cinĂ©tica, y despuĂ©s en energĂa mecánica rotativa.
Marco legislativo de las Centrales termoeléctricas de biomasa en España
La generaciĂłn de energĂa elĂ©ctrica en España corresponde a inversores privados, aunque es una actividad fuertemente regulada por el estado.
Diferentes leyes y decretos regulan esta actividad, y es imprescindible para cualquier técnico que trabaja en centrales de biomasa conocer dicho marco legal.
Las distintas actividades relacionadas con la energĂa elĂ©ctrica están sujetas a una cierta intervenciĂłn del Estado, dada la trascendencia de estas actividades.
Tradicionalmente, se ha utilizado el carácter de Servicio PĂşblico siendo el Estado el responsable de la generaciĂłn, transporte, distribuciĂłn y comercializaciĂłn de energĂa elĂ©ctrica.
Hoy ya no se trata de un Servicio Público, ya que estas actividades están totalmente liberalizadas.
La intervenciĂłn pĂşblica se mantiene actualmente al ser actividades sujetas a una fuerte regulaciĂłn. Será interesante estudiar en primer lugar como son las diferentes normas que pueden afectar a las actividades relacionadas con la generaciĂłn, transporte y venta de energĂa elĂ©ctrica.
Biomasa para uso doméstico
Aunque me he centrado más en la obtenciĂłn de energĂa para electricidad se ha mencionado tambiĂ©n el uso de la biomasa para generar calor para el uso de la calefacciĂłn y mejor aĂşn, a nivel domĂ©stico con calderas y estufas dedicadas exclusivamente a ello.

Si quieres más informaciĂłn puedes leer el artĂculo de mi compañero Germán Todo lo que debes saber sobre las estufas de pellets
