Seguramente alguna vez hayas vivido las fuertes tormentas de verano. Y es que durante determinadas épocas del año, las condiciones ambientales son más propensas a generar tormentas violentas. En este caso, vamos a hablar de las tormentas de verano y su formación.
Si quieres conocer cómo se forman las tormentas de verano y cuáles son sus consecuencias, éste es tu post.
Tormentas de verano
Cuando el verano está a la vuelta de la esquina, las temperaturas comienzan a subir. Con ello, lo hace también la cantidad de aire que ascienden altitud. No olvidemos que la dinámica de la atmósfera funcionan de una forma determinada. El aire caliente es menos denso, por lo que tiende a ascender en altitud. Conforme alcanza altitudes mayores, se topa con otra capa de aire más frío. Si miramos el perfil térmico de la atmósfera baja vemos que la temperatura desciende conforme aumentamos la altura. Por ello, si el aire caliente se topa con aire más frío cuando alcanza alturas mayores, comienza a condensarse.
El grado de condensación del aire depende de la temperatura a la que llegue a la altura indicada y la temperatura existente en esa capa de aire. Si el grado de condensación del aire es fuerte y las condiciones ambientales se mantienen estables, se llegan a formar nubes de precipitaciones que pueden llegar a formar tormentas verdaderamente intensas.
Los días de verano normalmente amanecen soleados y con altas temperaturas. Sin embargo, en determinados días, aunque el día amanezca soleado, el cielo se empieza a oscurecer y desemboca en una tormenta. Son las altas temperaturas las que producen este tipo de tormentas. Vamos a ver cuáles el proceso puede que se forman las tormentas de verano.
Cómo se forman las tormentas de verano
Lo primero de todo es analizar cuáles son las condiciones ambientales iniciales. Comenzamos con un día con altas temperaturas y un sol que calienta la ambiente. Al calentar el ambiente, también lo hace el aire circundante. Cuando el aire se calienta y aumentar su temperatura, tiende a ascender porque es más ligero y se expande por la presión. Este vapor caliente que ha subido a cotas más altas entra en contacto con una masa de aire frío. Este contraste de temperaturas provoca que digas caliente se condensen en gotas de agua de forma rápida. El contraste entre frío y calor hace que se origina en las tormentas que suelen tener una duración de aproximadamente una hora.
El problema con este tipo de tormentas es la intensidad con la que caen las precipitaciones. Al condensarse gran cantidad de vapor de agua y convertirse en gotitas que forman las nubes de lluvia a una velocidad rápida, llegan a precipitar por la acción de la gravedad. No olvidemos que para que las gotas de agua puedan formarse en altitudes, se necesitan núcleos de condensación higroscópicos. Estos núcleos de condensación no son más que partículas en el ambiente que están flotando y que sirven como núcleo para que las gotas de agua se almacene en a su alrededor.
Cuando las gotas de agua alcanzan un peso que ya lo puede resistir a la acción de la gravedad, cae en forma de lluvia. Las tormentas de verano suele ser muy intensas pero tan sólo dura una hora aproximadamente. Este es el tiempo que tarda la nube de lluvia formada en desaparecer por la acción de este aire en ascensión. Conforme la tormenta se da, se sigue retroalimentando por una mayor cantidad de aire caliente que asciende y se topa en altitud con otros aires de menor temperatura.
Cómo saber si la tormenta está cerca
Es muy común que las tormentas de verano acaben sorprendiendo a las personas por qué suceden de una forma muy rápida e inesperada. El relámpago nos puede dar una pista sobre sí la tormenta está cerca o no. También nos puede dar otra pista sobre sí lo que se acercaba hacia nosotros son tormentas de verano o no. Hay una fórmula bastante sencilla que nos puede ayudar a conocer todo sobre esta tormenta.
Esta fórmula consiste en mirar el relámpago y calcular cuánto tiempo pasará hasta que se escuche el terreno. El relámpago es visto en el mismo momento en el que se produce. Sin embargo, el trueno se trasladará a la velocidad del sonido. Esta velocidad es de 340 metros por segundo. Por ello, dependiendo de la distancia a la que se encuentre la tormenta de nosotros tardará más o menos en solar dicho terreno. Un kilómetro de distancia se traduce en aproximadamente unos 3 segundos. Dependiendo del tiempo que haya tardado en sonar podemos predecir donde se encuentran las tormentas de verano.
Si pasan unos 3 segundos desde que vimos el relámpago hasta que sonó el trueno podemos saber que la tormenta se encuentra a un kilómetro de distancia. Si pasan 6 segundos, estará a dos kilómetros. Es así como, de forma sucesiva, podemos predecir donde se encuentra la tormenta en ese momento. Gracias a este tipo de cálculos podemos huir ver esta tormenta antes de que llegue a nosotros.
Peligros de las tormentas
Como hemos mencionado antes, aunque las tormentas de verano suelen durar muy poco tiempo, suelen tener una gran peligrosidad. Está peligrosidad se debe a la intensidad con la que caen. Vamos a poner un ejemplo que suele suceder de forma frecuente durante los días de verano. Estamos a primera hora de la mañana y levantamos la persiana viendo que hace un sol brillante y un calor que anima a bañarnos en la piscina. Sin embargo, este calor intenso puede llegar a provocar una tormenta lo largo del día.
El problema es que, en ocasiones, suele venir acompañada de fuertes granizadas. Es el granizo el que causa graves daños materiales. La formación de granizo se debe a que la condensación se da con demasiada velocidad. Este granizo el que puede causar daños materiales y a la agricultura, sobretodo.
Las tormentas de verano también suelen venir acompañadas con las tormentas eléctricas. Son relámpagos que iluminan de forma constante el cielo y, por ello, se recomienda no refugiarse en árboles ni estar en contacto con objetos metálicos. Los electrodomésticos y cualquier aparato electrónico que éste ha conectado a electricidad se debe desenchufar ya que podría ser dañados por estas tormentas.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre las tormentas de verano y cómo ocurren.