La niebla es un tipo de fenómeno meteorológico que surge en los lugares con una saturación de humedad bastante alta. La única diferencia que existe entre las nubes que podemos ver en el cielo y la niebla es que esta ocurre a nivel del suelo. Existen diferentes tipos de niebla según su formación y características.
En este artículo vamos a contarte cuáles son los diferentes tipos de niebla que existen, cuáles son sus características y formación.
Presencia de niebla
La aparición de niebla en un lugar y momento determinado indica que el vapor de agua presente en el aire ha alcanzado un estado de saturación. La única diferencia entre las nubes y la niebla que vemos a cierta altura en el cielo es que esta última se encuentra al nivel de la superficie terrestre (caso especial de las nubes del género Stratus). En ambos casos, tenemos un hidrometeoro, que consiste en una suspensión de minúsculas gotas de agua, normalmente de pequeño tamaño. Técnicamente, cuando la visibilidad horizontal es inferior a un kilómetro, hablamos de niebla.
Hay una variedad de situaciones en las que se puede crear niebla, pero todas se reducen a dos mecanismos principales de formación: enfriamiento y evaporación. En el primer caso, cuando la temperatura desciende hasta el punto de rocío, se produce un cambio de fase de gas a líquido y comienzan a formarse gotas de niebla, a expensas de la condensación de vapor de agua en el ambiente. La niebla de radiación o niebla de irradiancia y la niebla de advección son ambas nieblas refrescantes, aunque todas tienen sus propias singularidades y se forman en diferentes entornos.
Tipos de niebla
La niebla típica que se forma en los valles y mesetas del interior peninsular, preferentemente durante los meses de invierno, es la niebla radiante. El enfriamiento nocturno cerca del suelo, donde el aire está en calma en una atmósfera estable, hace que estas nieblas formen amplios bancos, y en condiciones especialmente favorables (previamente llenas de humedad y temperaturas bajas o muy bajas, de 0 a 5 ºC) especialmente duraderas. Estas nubes son estáticas, a diferencia de la niebla de advección, que se crea cuando grandes cantidades de aire cálido y húmedo se deslizan sobre un océano o suelo frío. En este caso, son las típicas nieblas costeras que no siguen un ciclo día-noche y pueden entrar en erupción en cualquier época del año y en cualquier época de la estación.
Los mecanismos de evaporación también crean niebla marina, como la mayoría de las nieblas de advección, pero en este caso la niebla se forma cuando el vapor de agua de una superficie marina relativamente cálida entra en contacto con el aire más frío que se encuentra sobre ella. Esta niebla es común en los mares polares y se conoce como «humo ártico». La evaporación también es un proceso clave en la formación de algunas nieblas frontales. Los frentes cálidos a veces lloviznan y, en términos sencillos, es común identificar ambos fenómenos, sin distinguir entre llovizna, gotas de lluvia muy pequeñas y niebla.
De hecho, no hay mucha diferencia entre los dos tipos de meteoros (llovizna y niebla) cuando nuestras gotas de lluvia son ligeramente más grandes de lo normal en este último. Bajo los nombres de nieblas lloronas, meonas o chorreras, se conocen aquellas nieblas que son húmedas y sujetas a ligeras precipitaciones.
Nombres que se le da en diferentes lugares
Hay decenas -tal vez cien- en España utilizadas para referirse al regionalismo de niebla o neblina. Por un lado, existen variantes de este par de términos, como nebra, niebria, nebría, niubrina o nublina. Para la tierra asturiana se usaban palabras como borrina, borrín o burriana. También encontramos la última palabra con la forma gurriana, y la variante cantábrica (guarrina), donde se reconoce llovizna mezclada con niebla.
Entre los nombres más extraños para la niebla, por un lado tenemos taró (o tarol). Con origen en Fenicia, en la Costa del Sol y el Campo de Gibraltar, denominan a este patrón una niebla marina muy persistente que se forma principalmente en verano y principios de otoño en torno al estrecho de Gibraltar, extendiéndose en ocasiones por el mar de Alberán, debido a las ensenadas procedentes de África. Vientos secos del sur, que lograron evaporar mucha agua del mar. Los buques que cruzan el estrecho deben contar con señales audibles para evitar posibles colisiones.
Otro término singular es dorondón. Lo usan en Aragón para referirse a una niebla muy espesa y fría, helada en muchos casos. Esto último ocurre a temperaturas por debajo de 0 ºC (el punto de congelación del agua), donde las gotas que forman la niebla se sobreenfrían (en un estado de fase de transición llamado subfusión), por lo que cuando golpean cualquier cosa, como postes, cercas, árboles o arbustos congelar inmediatamente, formando una capa de hielo, y nombrada escarcha. El resultado es un paisaje blanco que recuerda a una nevada, o un paisaje que provoca heladas intensas.
Finalizamos nuestro breve repaso a la nomenclatura de las nieblas con algunos otros términos, como macazón, utilizado internamente en Cantabria para referirse a la niebla baja, cerrada, pero que ocupa sólo un pequeño solar (biblioteca de la niebla), boira, el boirón realzado (Serrablo comarca, en el Alto Aragón) y su pequeña boirina, en Cataluña, lo utilizan para identificar la niebla, y finalmente bufo o bufa, que toma su nombre de las montañas bajas de niebla que se elevan desde el valle, impulsadas por la brisa diurna.
Otros tipos de niebla
Niebla de advección
La niebla que se forma cuando una masa de aire húmedo pasa sobre una superficie más fría es una niebla de advección. Las bajas temperaturas de la superficie conducen a temperaturas más bajas en las masas de aire húmedo. Esto aumenta su humedad relativa y hace que el vapor de agua en el aire se condense.
Niebla de evaporación
La niebla de evaporación, o niebla de advección fría, se forma por el movimiento de aire frío y estable sobre una masa de agua mucho más caliente. A medida que parte del agua caliente se evapora, el aire frío de arriba se satura y el vapor de agua se condensa en aire frío. Esto crea lo que se conoce como niebla de vapor, mar de smog o smog del mar ártico.
Niebla de montaña
Otro tipo de niebla es la niebla de montaña, porque la base de la nube está más baja que la cima de la montaña.
Niebla frontal
La niebla frontal se forma cuando la lluvia proviene del aire cálido y cae sobre el aire frío y estable. Si el viento es ligero, la evaporación de las gotas de lluvia puede saturar el aire cerca del suelo, creando niebla.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre los diferentes tipos de niebla y sus características.