El terremoto en Marruecos del pasado viernes ha sido, probablemente, uno de los más devastadores de la historia de ese país. Sin embargo, lo que llama la atención de los expertos es su intensidad, no el hecho de que se haya producido.
La nación alauí se encuentra en una zona de riesgo de seísmos, como te explicaremos a continuación. Pero, además, ni siquiera la fuerza de este terremoto es sorprendente. En 2004, el país africano sufrió otro de 6,4 grados en la escala de Richter y, en 1960, la ciudad de Agadir registró uno de 5,8 que dejó más de doce mil víctimas. Por tanto, el terremoto en Marruecos del pasado viernes nada tiene de sorprendente. Pero ¿por qué se produjo? Te lo mostramos a continuación.
Las causas del terremoto en Marruecos
Como sucede con otras zonas de nuestro planeta, Marruecos se encuentra sometido a la influencia de poderosas fuerzas tectónicas que, a veces, liberan energía ocasionando seísmos. En concreto, se halla cerca de la confluencia de dos placas tectónicas: la africana y la euroasiática.
La primera incluye grandes áreas del propio continente africano y de los océanos Atlántico e Índico. Por su parte, la segunda se extiende desde el Atlántico hasta el norte del Pacífico englobando buena parte de Europa y de Asia. Además, en la zona del mar Mediterráneo, la placa africana está en permanente movimiento hacia el norte y esto provoca que choque con la euroasiática.
Esa convergencia ha dado lugar a distintos fenómenos geológicos como formación de montañas o actividad volcánica. Por ejemplo, ha sido esencial en la aparición de los Alpes e influye en la actividad de los volcanes de Italia. Pero, además, la constante interacción entre ambas placas da lugar, justamente, a terremotos como el del pasado viernes.
¿Cómo ha sido el terremoto? Intensidad y epicentro
El devastador terremoto que ha sufrido el país africano ha tenido una intensidad de 6,8 en la escala de Richter. Así lo ha indicado el Servicio Geológico de Estados Unidos, que también ha destacado que se trata del más fuerte que sufre la zona desde 1900. No obstante, como hemos visto, no por mucha diferencia, ya que el de 2004 solo tuvo cuatro décimas menos. Además, unos veinte minutos después del primer temblor, se produjo una réplica de 4,8 grados.
El epicentro estuvo a unos setenta kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech, concretamente en plenas montañas del Atlas. Como sabrás, recibe ese nombre el punto de la superficie terrestre que se halla sobre el hipocentro o foco interior de la tierra donde se produce el terremoto. Por tanto, es el área más afectada. Esta circunstancia ha provocado que haya habido más víctimas, puesto que las construcciones de esa zona no estaban preparadas para seísmos.
De hecho, la magnitud del terremoto no ha sido tan fuerte como otras. Por ejemplo, el de Chile de 2010 la tuvo de 8,8 grados y el ocurrido en el Océano Índico en 2004 alcanzó una intensidad de 9,3. No obstante, el más violento que se ha registrado tuvo lugar, igualmente, en la localidad chilena de Valdivia en 1960. Fue de 9,5 grados en la escala de Richter.
Entonces te preguntarás por qué ha sido tan devastador el desencadenado en Marruecos el pasado viernes. Según los expertos, la causa ha sido la poca profundidad del hipocentro o foco. Este se situó tan solo a 8,5 kilómetros bajo la superficie terrestre. Y es que, cuanta más profundidad tenga, más se atenúan las ondas sísmicas y disminuyen los daños en la superficie.
Pero otro motivo de la devastación causada por el terremoto, de la que te hablaremos más adelante, tiene que ver con la pobreza de la zona. Como te decíamos, las casas de las montañas del Alto Atlas no están preparadas para seísmos. Son construcciones de adobe y barro. Y, para mayor desgracia, el terremoto ocurrió de noche, cuando la gran mayoría de sus habitantes estaban dentro de ellas.
Los trágicos efectos del terremoto de Marruecos
Según los datos más recientes, el seísmo del país africano ha causado casi tres mil víctimas mortales y unos dos mil quinientos heridos de los cuales mil quinientos están graves. Sin embargo, se trata de cifras provisionales. De hecho, las autoridades el país alauí están seguras de que han perecido muchas más personas.
Hay numerosas aldeas remotas de las montañas del Atlas a las que ni siquiera se ha llegado todavía porque las carreteras han quedado cortadas. En ellas, que, como decíamos, han sido el epicentro del seísmo, es seguro que muchas personas han quedado atrapadas bajo los escombros. De hecho, el ejército del país se afana estos días en abrir esas vías para llevar alimentos y agua a los afectados. Por tanto, habrá que esperar un tiempo para conocer las auténticas dimensiones de la catástrofe. Afortunadamente, la ayuda internacional ha comenzado a llegar a Marruecos, cuyas autoridades han declarado tres días de luto nacional.
Concretando más, las zonas del país que mayores daños han sufrido son las que se encuentran en torno a las ciudades de Marrakech, Uarzazat, Azilal, Tarudant y Chichaoua. No obstante, los efectos del seísmo se han sentido en la cercana Argelia y en nuestras islas Canarias. Incluso ha habido algunas zonas de la Andalucía occidental que los han notado. Y esto nos lleva a plantearnos si un terremoto de estas características podría suceder en España.
Riesgo sísmico en España
También nuestro país está cerca de la confluencia de las placas africana y euroasiática. Por tanto, debido a su interacción, igualmente puede desencadenarse actividad sísmica en España. Sin embargo, el Instituto Geográfico Nacional considera este riesgo «moderado». En nuestro caso, influye la fractura entre placas que abarca desde Azores hasta Túnez pasando por Gibraltar.
Como consecuencia, las zonas con mayor actividad sísmica en nuestra nación son las del sur y el levante. Más concretamente, se trata de las provincias de Granada y Almería, en las que, además, actúan varias microplacas tectónicas. Y, como no se puede adivinar con certeza cuándo va a suceder un terremoto, es importante que estas zonas cuenten con la protección adecuada frente a él.
En conclusión, el terremoto de Marruecos ha tenido unos efectos devastadores para la población. De momento, solo se conocen datos provisionales, pues muchas zonas todavía permanecen aisladas. Sin embargo, toda la ayuda que enviemos será poca. Anímate a contribuir.