En el este de California, hay un enorme complejo volcánico conocido como Supervolcán caldera de Long Valley y la cadena de cráteres Mono-Inyo. Esta formación geológica ha estado sujeta a una constante actividad sísmica y levantamiento de tierra en las últimas décadas.
Por ello, vamos a dedicar este artículo a contarte todo lo que necesita saber sobre el Supervolcán caldera de Long Valley, sus características, origen e historia.
Historia del Supervolcán caldera de Long Valley
Durante incontables milenios, la actividad volcánica ha sido una característica destacada de esta región, sin signos de disminuir. Es inevitable que se produzcan futuras erupciones. Cuando tal evento ocurra, es probable que sea relativamente menor y surja de una ubicación en la cadena Mono-Inyo.
El resurgimiento de la cúpula en la zona central de la caldera se produjo muy cerca de la erupción responsable de su formación. En el resurgimiento inicial de la cúpula, una vasta masa de agua se acumuló dentro de la caldera, marcando la costa con líneas de estrangulamiento visibles tanto en las paredes de la caldera como en la península de la cúpula resurgida. Con el tiempo, el lago se disipó y finalmente se vació a través del desfiladero del río Owens.
El volcán Long Valley tiene una historia fascinante. Es un sistema volcánico masivo situado en el este de California, que se origina a partir de magma en las profundidades de la superficie de la Tierra. Se cree que el volcán entró en erupción al menos una vez cada 200.000 años. La erupción más antigua conocida tuvo lugar hace unos 760.000 años, mientras que la más reciente ocurrió hace unos 50.000 años. El volcán ha dejado un rico legado, incluida la formación de la Caldera Long Valley, que es una enorme depresión con un diámetro de aproximadamente 20 millas. La caldera sigue siendo una fuente activa de energía geotérmica y ha desempeñado un papel importante en la configuración del paisaje y la ecología de la región.
Mammoth Knolls representa la erupción volcánica más reciente a lo largo de la falla del anillo de la caldera, que ocurrió hace aproximadamente 100.000 años. En la cuenca topográfica, se estima que el Cono 2652 ubicado en West Moat tiene alrededor de 33.000 años.
Rocas y lavas del Supervolcán caldera de Long Valley
El tipo de roca que emerge de las erupciones volcánicas, comúnmente conocida como lava, se identifica por su color claro y su composición. Esta composición normalmente consta de un contenido de sílice que oscila entre el 62 y el 69 %, junto con cantidades moderadas de sodio y potasio.
Las lavas que se encuentran en la región noroeste del pozo tienen una edad de entre 40.000 y 27.000 años. En cuanto al borde occidental, el rango de edad es de aproximadamente entre 16.000 y 17.000 años. En los últimos años, ha habido una considerable actividad sísmica, deformaciones y otras perturbaciones en la caldera, que todavía está térmicamente activa y alberga numerosas fumarolas y fuentes termales.
La central eléctrica de Casa Diablo funciona con un fuerte sistema geotérmico ubicado dentro de la caldera. Este sistema genera una cantidad impresionante de energía, suficiente para abastecer a 40.000 hogares.
Los cráteres monoinoicos que se extendieron desde finales del Pleistoceno hasta principios del Holoceno estaban situados en el borde topográfico noroeste de la caldera. Por el contrario, la Montaña del Mamut estaba ubicada en el borde topográfico suroeste. Tanto los cráteres como la Montaña del Mamut estaban situados al oeste de la caldera estructural. Estas características geológicas eran únicas en términos de composición química y actividad tectónica en comparación con el sistema magmático de Long Valley.
Actividad volcánica más reciente
En los últimos tiempos, el volcán Long Valley ha mostrado signos de mayor actividad. Esta actividad se ha caracterizado por un aumento de la sismicidad, la deformación de la superficie del suelo y la liberación de gases. Los científicos han estado monitoreando de cerca el volcán y han notado que la actividad puede ser indicativa de una erupción inminente. El volcán Long Valley es un volcán complejo que tiene el potencial de causar daños significativos a las áreas circundantes si ocurriera una erupción. Por lo tanto, los científicos están trabajando incansablemente para recopilar datos y evaluar la situación con el fin de proporcionar advertencias adecuadas y prevenir cualquier posible desastre.
Hace unos 300 años, el lago Mono fue el lugar de la última actividad conocida en la región. En tiempos más recientes, tanto la Montaña del Mamut como la caldera de Long Valley han atravesado importantes períodos de inestabilidad, con fenómenos como terremotos, alteraciones del suelo y liberación de gases volcánicos.
Los vulcanólogos deben gestionar una gran cantidad de sensores de campo que proporcionan datos inmediatos para rastrear sucesos y evaluar posibles peligros. Las erupciones volcánicas explosivas pueden generar ardientes corrientes de ceniza caliente, también conocidas como flujos piroclásticos. Estas corrientes pueden viajar a velocidades increíbles, alcanzando más de 100 millas por hora, y dejando destrucción a su paso. A lo largo de la cordillera Mono-Inyo, las erupciones de los últimos 5.000 años han dado lugar a delgados flujos piroclásticos que se han extendido más de 8 kilómetros de longitud desde varios sitios.
Afortunadamente, las principales regiones pobladas situadas en las cercanías del área de Long Valley están situadas a una distancia segura de los posibles sitios de erupción. Como resultado, es improbable que se vean afectados directamente por cualquier flujo piroclástico que pueda ocurrir en el futuro.
En la localidad de Long Valley ha habido casos de erupciones volcánicas menos agresivas. Estas erupciones generalmente comenzaban con estallidos suaves, lo que resultaba en la formación de conos volcánicos comparativamente diminutos, que medían menos de 0,3 km de diámetro. Las erupciones generaron corrientes de lava licuada y caliente que se extendieron a una distancia de unos pocos kilómetros.
Hace unos 5.000 años, hubo varias erupciones volcánicas que dieron como resultado la formación de los Conos Rojos ubicados al sur de la Montaña del Mamut. Además, hace entre 400.000 y 60.000 años, hubo casos de flujos de lava fluida que se originaron en áreas cercanas a la base de la Montaña del Mamut.
Si bien los flujos de lava pueden causar grandes daños a la propiedad, normalmente representan poca amenaza para la vida humana debido a su lentitud, que a menudo no es más rápida que una caminata tranquila. Aunque la probabilidad de que se produzca una erupción volcánica en un año determinado es baja, es inevitable que tal evento ocurra en la región de Long Valley en algún momento.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre Supervolcán caldera de Long Valley y sus características.