Cómo una triste crónica de una muerte anunciada, en medio de la gran deforestación que está afectando a todo el globo terráqueo. Cuando todos estamos viviendo los efectos del cambio climático, la contaminación, la destrucción continua de la naturaleza… Entendemos algo. La explotación del planeta a cambio de dinero para comer, acabará dando dinero sin nada que comer. El dinero no se destruye, el planeta sí. Cuánta sabiduría hay en la profecía India que dice: «Sólo cuando se haya talado el último árbol; sólo cuando se haya envenenado el último río; solamente cuando se haya pescado el último pez; sólo entonces, descubrirá el hombre blanco que el dinero no es comestible».
A pesar de todo, nos encontramos a veces con noticias, que parecen salidas de un lugar donde nada de esto afecta. Esta vez, una medida decretada por el presidente de Brasil, Michel Temer. ¿Cuál es? La disparatada idea de subastar una enorme parte de la selva del Amazonas, equivalente a toda el área que ocupa el país de Dinamarca. ¿Los motivos? Explotación minera de la zona, económicos.
La justicia brasileña tumba el decreto promovido por Temer
Brasil, se encuentra inmersa en un proceso de grandes privatizaciones en general. La subasta de esta área del amazonas, pretendía servir como moneda de cambio a la crisis política y de crecimiento económico del país. Poco a poco saliendo de la recesión, pero con un crecimiento muy leve. Esta medida suponía además, la entrada de empresas privadas, y no ha estado exenta de una gran polémica. Ecologistas, políticos, ambientalistas, pueblos, se han hecho eco de esta noticia «la subasta del pulmón del planeta».
Esta medida, que fue adoptada la semana pasada, no ha tardado en llegar a los tribunales de justicia del propio país de Brasil. Una semana más tarde, este pasado miércoles, la justicia brasileña suspendía la decisión tomada por el gobierno de Michel Temer. La importancia de esta área, radica en las fuentes de minerales que allí yacen. Cobre, hierro, manganeso, oro… Una zona además muy extensa, de 47.000 kilómetros cuadrados. El juez del distrito federal de Brasilia entiende, que no se puede modificar una reserva mineral mediante un simple acto administrativo del presidente.
¿Cómo se pretendía efectuar?
Una vez liberada la zona para la explotación minera, el paso siguiente sería subastar las licencias para su explotación a las empresas. El Gobierno confirma que todas las áreas de protección continuarían siéndolo. Por parte de la oposición aseguran que al contrario de esto, el 90% de las zonas habilitadas para su explotación corresponden a zonas que son protegidas.
Luiz Jardim, profesor de Geografía de la Universidad Estatal de Río de Janeiro que además es miembro del Comité Nacional en Defensa de los Territorios frente a la Minería dijo, «el Gobierno sabe que esa es una área de intensa biodiversidad y altamente preservada. Y aún y así, está mostrando que tiene interés en abrir el lugar para grandes proyectos». Además, prosigue, «sabemos que la minería es la puerta de entrada para otros intereses, como abrir carreteras, atraer madereros… es una amenaza para esas unidades en conservación».
El rico Amazonas, en grave peligro
El amazonas, no sólo es el pulmón del planeta produciendo el 20% del oxígeno de todo el mundo. El 20% del agua fresca del mundo pertenece allí. 1 de cada 5 especies de aves es originaria del Amazonas. El 80% de las frutas del mundo, son originarias de allí. Ni hablemos de los insectos, y la gran biodiversidad que allí encontramos. Una enorme y gigantesca riqueza natural que es.
El senador de Amapa, Randolfe Rodrigues, calificó el decreto como «el peor ataque de la historia al Amazonas». Añadió además en la entrevista con la agencia Reuters, «vamos a hacer todo lo que podamos, acciones judiciales, acciones legislativas, presión sobre los líderes, artistas y si es necesario iremos al papa«. Hace un mes, el papa Francisco expresó un apoyo y mayor protección para el Amazonas así como para los indígenas que allí viven, en el Ecuador.
Esperamos no tener que enterarnos más de ninguna atrocidad semejante a esta. No es muy buena forma de agradecer, a esta preciosa selva que tanto nos ha dado y nos sigue dando, la de explotarla por sus minerales.