Existen diferentes tipos de ecosistemas en función de las condiciones ambientales presentes. Hoy vamos a hablar de la selva baja. Corresponde a la zona de la selva amazónica peruana que se extiende desde el este del pie del monte andino. Es un tipo de selva lluviosa tropical calidad que tiene lugares con alturas desde los 80 a 400 metros sobre el nivel del mar. Se encuentra la misma Cuenca del río Amazonas.
En este artículo vamos a contarte todas las características, hábitat, flora y fauna de la selva baja.
Características principales
Se trata de un tipo de selva también conocido con el nombre de región Omagua. Está compuesta por una formación vegetal con una estructura compleja de entre 3 y 4 estratos o pisos de vegetación sumado un sotobosque. Estos pisos de vegetación se debe a las diferentes especies y alturas que se van formando en función de sus crecimiento y desarrollo. El sotobosque es la parte baja que se encuentra debajo de las copas de los árboles. Al ser un lugar con bastante biodiversidad abundan las plantas epífitas y trepadoras. Todas estas características forman parte del bioma de la selva tropical lluviosa.
La región de la selva bajar presenta tierra firme y seca, aunque también son selvas inundables, pantanos y sabanas arboladas de palmeras. La característica principal de la selva baja destaca por tener un clima cálido cuyas temperaturas se encuentran en torno a los 26 grados de media y con precipitaciones abundantes que superan los 3.000 mm.
La selva se ubica en una planicie ondulada bastante extensa en la que los suelos predominantes tienen una textura arenosa y una red de ríos y caños bastante abundante. La fauna es densa y predominan los insectos y arácnidos. Esta predominancia se debe en cuanto a la diversidad de especies y número de individuos. También hay que destacar la presencia de abundantes peces de agua dulce, aves, reptiles y mamíferos entre los que encontramos el pecarí, numerosas especies de monos y el jaguar.
En cuanto a la flora, existe una gran diversidad de plantas vasculares. También vemos numerosas especies de helechos, musgos y líquenes. Se puede decir que en tan sólo una hectárea de la selva baja se identifica más de 300 especies de árboles con abundancia de orquídeas y bromelias.
Hábitat y ubicación de la selva baja
Toda esta región hace referencia a la zona natural de Perú y se desarrolla en la planicie que se extiende en la zona este del país. Esta zona es la más grande puesto que ocupa una extensión de alrededor de 65 millones de hectáreas. Los límites de la selva baja se encuentran con la selva alta en el piedemonte andino. También se puede encontrar al este si continuamos por la selva amazónica de Brasil, al sureste limita con Bolivia y en la parte del norte limita con Colombia y Ecuador.
Esta selva baja es considerada como un bioma. Esto es debido a que no es un simple ecosistema, sino que se trata de un bioma que incluye un mosaico de ecosistemas en su interior. Es decir, es un conjunto de ecosistemas en un solo territorio. Encontramos la selva no inundable, la selva inundable, pantanos, humedales, selvas de arenas blancas, etc. Cada uno de estos ecosistemas posee unas características únicas y una biodiversidad que se desarrolla conforme a dichas características ambientales.
La estructura vegetal que tiene la selva baja no es uniforme. Debido a la gran diversidad de especies y la colocación y requerimientos de cada una de ellas hace que exista una gran variabilidad en la estructura. Por un lado, en la zona no inundable encontramos suelos que tienen una mejor estructura y mayor fertilidad. Estas zonas cuentan con 3 o 4 pisos de vegetación arbórea y un sotobosque compuesto por árboles y plantas herbáceas. Gracias a la fertilidad del suelo y la densidad de los árboles se mantiene un nivel de humedad alto durante todo el año.
Por otro lado, tenemos el piso superior de la selva que alcanza hasta los 40 metros de altura y cuenta con árboles emergentes que tienen una altitud de 60 metros. Rodeando los troncos de los árboles y en la parte más baja encontramos gran diversidad de plantas trepadoras de diversa naturaleza así como plantas epífitas.
Suelo y clima de la selva baja
Lo más normal es que los suelos que predominan en la selva baja tienen una composición de arena, aunque es de lo más variable. También vemos suelos franco arenosos que suelen pasar a ser suelos arcillosos en las zonas de mayor humedad. Normalmente son suelos pobres en nutrientes y se encuentran circulando en la masa de vegetación. Existe toda una cantidad de hongos y sectas que contribuyen al reciclaje y el aprovechamiento de los nutrientes de la materia orgánica muerta. Como sabemos, existen diferentes interacciones entre los seres vivos que se denomina cadena trófica. El último eslabón de dicha cadena son los descomponedores. Su principal función es la de extraer la materia orgánica de los organismos muertos. Gracias a ello se consigue volver al estado inicial y recuperar toda la energía de la red.
En cuanto al clima, en la selva baja predomina el clima tropical lluvioso y cálido. La temperatura son bastante altas pero las condiciones ambientales hacen que las precipitaciones sea muy abundantes. Su alta humedad proviene de las nubes que son arrastradas desde la vertiente atlántica en dirección desde el este al oeste. Todas las nubes suelen ascender por la cara oriental de los andes y al enfriarse se condensan para desatar fuertes tormentas y abundante precipitaciones.
Las máximas temperaturas que se encuentran en la selva baja rondan los 37 grados durante el mes de octubre. Las mínimas se presentan en el mes de julio y rondan los 17 grados. Por ello, la media suele estar en 26 grados. Al tener lluvias abundantes, con valores de hasta 3.000 milímetros, llegaron incluso a superar algunas zonas con 5.000 mm hace que el nivel de humedad relativa sea muy alta. Encontramos zonas con un nivel de humedad relativa del 88%.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre la selva baja y sus características.