Una observación desde el espacio puso el foco en la zona poniente de Santiago: el satélite Tanager-1 (o Tanager One), operado por la organización sin ánimo de lucro Carbon Mapper, identificó una emisión inusual de gas metano sobre el sector industrial de Maipú. La detección ha activado actuaciones de las autoridades y ha reavivado el debate sobre los controles ambientales en áreas con intensa actividad logística.
Según los datos iniciales, el sistema registró una pluma del orden de dos toneladas por hora alrededor del mediodía, una magnitud calificada como elevada por especialistas en calidad del aire. Para hacerse una idea, se trataría de un volumen comparable al contenido de cerca de un millar de balones de gas domésticos liberados en una hora, una cifra que exige aclarar el origen y las condiciones del evento.
Qué se detectó y dónde
Los mapas de concentración elaborados por Carbon Mapper sitúan la emanación en el polígono industrial de Maipú, entre las calles Santa Marta y El Toqui, un área con alto flujo de camiones y bodegas. La huella espacial de la pluma coincide con una instalación de trasvase de gas natural licuado (GNL) a vehículos, lo que orientó las primeras hipótesis de trabajo sin descartar otras fuentes potenciales.
La medición captada en la pasada del satélite se produjo en torno al mediodía local, cuando las condiciones atmosféricas favorecen el contraste de columnas de metano. Este tipo de observación remota permite ubicar con precisión geográfica las emisiones puntuales y priorizar las verificaciones en terreno.
Cómo se activó la alerta institucional
A partir del hallazgo, Marcelo Mena, exministro del Medio Ambiente y director de Global Methane Hub, ingresó una denuncia ante la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) por presunto incumplimiento de instrumentos de gestión ambiental. En su presentación, subrayó la obligación de notificar episodios potencialmente peligrosos, especialmente si se producen en cercanías de zonas habitadas.
Carbon Mapper, que mapéa y cuantifica emisiones de metano y CO₂ para hacerlas públicas, aportó las coordenadas y las evidencias satelitales del episodio. Con esa base, se solicitó a la autoridad que fiscalizara la actividad de las instalaciones vinculadas al área señalada y verificara eventuales infracciones a la resolución de calificación ambiental y a normas del plan de descontaminación.
Fiscalización municipal y primeras medidas
La Municipalidad de Maipú informó que, tras recibir los antecedentes, realizó inspecciones en el polígono industrial. Durante el operativo, el equipo de Inspección detectó irregularidades en una de las empresas, incluyendo falta de patente comercial y exigencias ambientales incumplidas, por lo que se cursaron denuncias al Juzgado de Policía Local.
Como medida inmediata, el municipio indicó que prohibió el funcionamiento de la instalación afectada hasta que acreditara el cumplimiento normativo, otorgando además un plazo administrativo para la regularización. De forma paralela, se compartió la información con cuerpos de emergencias para reforzar la vigilancia preventiva en el entorno.
Riesgos del metano: salud y clima
Expertos consultados señalan que el metano es un gas asfixiante en altas concentraciones porque desplaza el oxígeno, lo que en espacios cerrados puede generar hipoxia con síntomas como mareos, cefaleas o pérdida de conciencia. En ambientes abiertos la pluma tiende a diluirse, pero no por ello desaparece su impacto en seguridad y operación industrial.
Desde la perspectiva climática, el metano es un potente gas de efecto invernadero, con una capacidad de atrapar calor muy superior al CO₂ a corto plazo. Así, incluso si la nube se dispersa, el aporte a la atmósfera contribuye al calentamiento global, reforzando la necesidad de detectar, cuantificar y reducir emisiones fugaces y persistentes.
Contexto en Chile y antecedentes del área
Datos de especialistas apuntan a que en Chile una parte relevante de las emisiones de metano procede de rellenos sanitarios, fruto de la descomposición de residuos orgánicos. No obstante, también se han identificado focos en zonas industriales y de transporte de combustibles, lo que exige vigilancia combinada terrestre y satelital.
En el entorno industrial de Maipú, organizaciones y vecinos han venido alertando sobre acopios de desechos inflamables y orgánicos en inmediaciones de empresas. Aunque el área no corresponde a un relleno sanitario, estas prácticas incrementan el riesgo ambiental y de seguridad, de ahí el llamado reiterado a reforzar la fiscalización y la transparencia de la actividad en el sector.
Próximos pasos y seguimiento
Con la denuncia en curso y las actuaciones municipales iniciadas, la expectativa es que la SMA determine responsabilidades y eventuales sanciones de acuerdo con la normativa vigente. En paralelo, se espera que las empresas involucradas implementen controles y protocolos de detección de fugas más estrictos, incluyendo monitoreo continuo y planes de contingencia.
El uso de tecnología satelital de alta resolución como Tanager-1 añade una capa de control público valiosa, pero su eficacia aumenta cuando se integra con inspecciones en terreno, mediciones directas y reportes oportunos por parte de los operadores. Esa coordinación interinstitucional será clave para evitar nuevos episodios y reducir emisiones fugitivas.
El episodio de Maipú deja varias certezas: la detección desde el espacio acelera la respuesta, la fiscalización local puede imponer medidas cautelares con rapidez y la evidencia científica respalda controlar el metano por su efecto en salud y clima; queda ahora consolidar la investigación, corregir fallos operativos y reforzar los estándares para que incidentes de esta naturaleza no se repitan.
