Parece ser que esta semana ha llegado por fin la llamada y temida canícula, por lo que habrá que armarse de paciencia y tirar de ventiladores y de aparatos de aire acondicionado para poder aguantar unos valores térmicos tan altos.
La canícula hace referencia al momento de más calor de todo el año y en el que las temperaturas superan los sofocantes 40 grados con suma facilidad.
Según las diferentes estadísticas, la canícula es el período más caluroso del año en donde las temperaturas alcanzan los valores más altos. La duración de este período suele abarcar desde el 15 de julio hasta el 15 de agosto, aunque suele depender de cada localidad. No hay una fecha exacta de dicho comienzo y esto se debe a varios factores como el hecho de que el Sol se encuentra muy alto a comienzos de verano o a la radiación solar que provoca que la Tierra se recaliente.
De esta forma, la canícula empieza más tarde en España, mientras que en otros lugares de Europa o África se adelanta. Durante el período que dura la canícula, se suelen producir de forma habitual entradas de aire cálido y seco procedentes del norte de África. En estos casos es importante tener una serie de cuidados para evitar los peligrosos golpes de calor, ya que en ocasiones pueden provocar la muerte de la persona que los sufre.
Según las predicciones meteorológicas, esta ola de calor durará de tres a cuatro días con temperaturas superiores a los 40 grados. Sin embargo, el calor ha llegado para quedarse y hay zonas de la península en las que la temperatura media durante estas semanas se situará en torno a los 38 grados. Ante estos hechos, solo queda refrescarse bien y protegerse en la medida de lo posible de las altísimas temperaturas propias del verano.
¿Qué es la Canícula?
En meteorología, el término canícula se refiere al período del año con las temperaturas más altas. Este fenómeno se presenta en el hemisferio norte y normalmente se presenta entre mediados de julio y principios de agosto. Durante estos días, los termómetros pueden superar los 40 grados centígrados, lo que provoca un calor extremo especialmente en el sur de España.
Un factor interesante a destacar es que la canícula en España tiene un inicio y fin que pueden variar dependiendo de la localización geográfica. Por ejemplo, en áreas costeras, el efecto del mar actúa como un moderador de las temperaturas, al contrario de lo que sucede en el interior de la península, donde el calor es más intenso. Si deseas conocer más sobre este fenómeno, puedes consultar la canícula para obtener más detalles.
Origen del Término Canícula
La palabra canícula proviene del latín canicula, que significa «perrito». Este término se asocia con la estrella Sirio, que forma parte de la constelación Canis Major. Durante la antigüedad, el orto helíaco de esta estrella coincidía con el inicio del período más caluroso del año, lo que a menudo se interpretaba como un augurio de calor extremo.
En la antigüedad, nuestros antepasados relacionaban el brillo de Sirio con el aumento de las temperaturas, ya que cada vez que la estrella hacía su aparición en el horizonte, el calor se intensificaba. Sin embargo, debido a la precesión de los equinoccios, hoy en día, Sirio aparece en el cielo matutino mucho después de que la canícula ha comenzado.
Condiciones Climáticas Durante la Canícula
En España, la canícula se caracteriza por una serie de fenómenos climáticos que aumentan las temperaturas locales. Durante este período, es común observar olas de calor causadas por altas presiones asociadas con masas de aire cálido que provienen del norte de África. Esta situación provoca no solo un aumento en la temperatura, sino también una disminución en la humedad, lo que intensifica la sensación de calor.
Además, los días durante la canícula suelen ser secos con cielos despejados, lo que añade otro elemento a las condiciones climáticas extremas. Durante este tiempo, las temperaturas pueden ser extremadamente peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como ancianos, niños y personas con enfermedades crónicas.
Temperaturas Más Altas Registradas Durante la Canícula
Un aspecto alarmante de la canícula son los registros de temperatura extrema que se han alcanzado en los últimos años. El 23 de julio de 1995 se registró la temperatura más alta en España, alcanzando 46,6 grados centígrados en los aeropuertos de Córdoba y Sevilla. Esta cifra no solo marca un récord, sino que también resalta el impacto del cambio climático, que ha permitido que los episodios de calor sean cada vez más intensos y prolongados.
Otro dato destacado ocurrió el 1 de agosto de 2003, cuando se alcanzaron los 45 grados en la ciudad de Badajoz, un evento que sigue siendo recordado como uno de los más extremos de la historia reciente. En el norte, en Amieva-Camporriondi (Asturias), se registraron 42 grados el 31 de julio de 2013, lo que supuso un récord histórico para la región.
Efectos de la Canícula en la Salud y el Medio Ambiente
La canícula no solo afecta las temperaturas, sino que también tiene consecuencias serias para la salud de las personas. Los golpes de calor son comunes y pueden ser mortales si no se tratan adecuadamente. La deshidratación es otro riesgo importante, y es crucial que se tomen medidas preventivas, como el consumo adecuado de agua y evitar la exposición al sol en las horas más calurosas del día.
Desde el punto de vista medioambiental, las altas temperaturas contribuyen a la sequía, afectando a los cultivos agrícolas. La escasez de agua puede llevar a una disminución en la producción agrícola y a un aumento en la probabilidad de incendios forestales, ya que el terreno seco se vuelve mucho más susceptible a arder. Para más información sobre este tema, puedes visitar el artículo sobre los incendios forestales.
Asimismo, la fauna se ve afectada por la canícula, ya que la escasez de agua y pasto puede causar un aumento en la mortalidad de diversas especies. Es esencial adoptar medidas de conservación para proteger a la fauna y flora locales ante este fenómeno climático.
Consejos para Afrontar la Canícula
Durante la canícula, es vital tomar precauciones para mitigar sus efectos. Aquí hay algunas recomendaciones:
- Hidratación constante: Beber agua con regularidad para evitar deshidrataciones.
- Evitar salir en las horas más calurosas: Limitar la actividad física y la exposición directa al sol entre las 12 y las 18 horas.
- Usar ropa ligera: Opta por prendas de colores claros y materiales transpirables.
- Protegerse del sol: Utilizar sombreros y gafas de sol para cuidar la piel y los ojos.
- Comidas ligeras: Preferir alimentos frescos como ensaladas y frutas que contienen mayor contenido de agua.
A continuación se incluyen imágenes que representan la canícula y su efecto:
La canícula, aunque es un fenómeno estacional, se ve cada vez más impactada por el cambio climático. A medida que las temperaturas globales aumentan, la duración y severidad de la canícula también tienden a incrementarse, lo que resalta la necesidad urgente de políticas ambientales más efectivas. A nivel personal, debemos ser conscientes de nuestros hábitos y hacer pequeños cambios que pueden tener un impacto significativo en la salud y el bienestar durante estos meses calurosos.