El microscopio es un instrumento bastante fácil de utilizar a simple vista, pero con gran cantidad de detalles que marcarán la diferencia. Todas las partes y elementos que están involucrados en la manipulación de la luz y la formación de una imagen aumentada se encuentran en el sistema óptico de un microscopio. Existen numerosas partes de un microscopio que hay que ir describiendo para poder entender el funcionamiento al completo.
Por ello, en este artículo vamos a enseñarte cuáles son las partes de un microscopio y sus características principales.
Partes de un microscopio: sistema óptico
El sistema óptico es la parte más importante de un microscopio. No referimos al sistema de iluminación que a su vez es el sistema óptico. Se clasifican para poder distinguir entre los elementos que se encargan de poder desviar o tratar la luz y los elementos que ayudan a un soporte estructural entre todas las partes del instrumento. Todas estas partes son los elementos del sistema mecánico. Los dos elementos principales que componen el sistema óptico de un microscopio son el objetivo y el ocular. Entre todo el sistema de iluminación también se incluyen algunas partes como lo son el foco, el diafragma, el condensador y los prismas ópticos.
Si un microscopio cuenta con una cámara digital también se considera parte del sistema óptico. Vamos a ver cuáles son las partes de un microscopio paso a paso. La primera es el objetivo. Se trata del sistema demente es que está situado cerca de la muestra y es la que proporciona la imagen aumentada. El aumento de un objetivo tiene un valor constante y es lo que nos señalaron la relación entre el tamaño de la imagen y el tamaño real del objeto. Por ejemplo: vamos a imaginar que tenemos el microscopio ajustado en 40x. Esto significa que la imagen que vemos será 40 veces mayor que la del objeto que existen la muestra.
La imagen aumentada se le conoce como imagen real. La mayoría de los microscopios tienen distintos objetivos para poder alcanzar distintos niveles de aumento. Hay que tener en cuenta que los microscopios se deben adaptar al tamaño de diferentes tipos de muestras. Habrá muestras de mayor tamaño y otras de menor tamaño. Estos lo que hace que haya que ajustar el objetivo.
Otro de los parámetros que define el objetivo de un microscopio es la apertura numérica. Este parámetro tiene una gran importancia ya que es el que define la resolución. Mientras tengamos una buena resolución podemos ver la muestra con mayor nitidez.
Tipos de objetivos
Vamos analizar cuáles son los diferentes tipos de objetivos que se pueden encontrar en un microscopio:
- Objetivo acromático: es el más simple y sirve para corregir la aberración esférica en el color verde y la cromática en los colores azul y rojo.
- Objetivo apocromático: es el tipo de objetivo más avanzado y ayuda a corregir la aberración cromática en cuatro colores. También puede ayudar a corregir la aberración esférica en tres colores.
- Objetivo en seco: son aquellos que alcanzan un aumento moderado y son más utilizados dado que son muy fáciles de emplear. Sólo que se utilizan en los laboratorios de prácticas de las carreras universitarias.
- Objetivos de inversión: están diseñados para poder alcanzar un aumento y una alta resolución a gran escala. Tienen una alta apertura numérica pero se requiere un medio adicional para situarlo entre la muestra y las lentes.
Partes de un microscopio: ocular
El ocular es el conjunto de lentes a través de las que observamos la muestra con los ojos. Aquí podemos observar un segundo aumento de la imagen. El objetivo produce la mayor parte del aumento y el angular es el que proporciona un aumento menor de magnitud que puede ir entre los 5x y 10x a. No olvidemos que el objetivo produce aumentos de 20x, 40x, 100x. Tampoco debemos olvidar que, a mayor cantidad de aumento, más complicado es manejar la nitidez.
El sistema de lentes oculares se encargan aumentar la imagen y corregir hasta cierto punto algunas de las aberraciones ópticas. Los populares tienen un diafragma que sirve para reducir los reflejos de luz que aparecen en las lentes. Existen algunos diferentes tipos de oculares. Los más utilizados son los oculares positivos y los populares negativos. Los positivos son aquellos en los que la luz pasa primero a través del diafragma y a continuación llega a las lentes. Los oculares negativos son aquellos en los que el diafragma se encuentra situado entre las dos lentes.
Fuente de luz y condensador
Son dos partes de un microscopio bastante interesantes. La fuente de luz es un elemento esencial que cualquier microscopio debe tener. Es fundamental para que pueda emitir la luz necesaria que pueda iluminar nuestra muestra. En función de la fuente de luz que existen en microscopio podemos distinguir entre microscopios de luz transmitida y microscopios de luz reflejada. Los primeros son aquellos que tiene la falta de luz debajo de la platina. Los segundos son aquellos que iluminan la muestra desde su cara superior.
Desde siempre los microscopios han funcionado mediante una bombilla incandescente que se integra en la estructura. Sin embargo, ya se ha mejorado con la nueva tecnología ya que tenía algunas desventajas. La primera era el consumo energético de estas bombillas. La segunda, era la cantidad de calor que emitían cosa que dificultaban mantenimiento de las muestras en unas condiciones buenas. No olvidemos que los análisis se deben realizar con la muestra en buen estado en todo momento.
En cuanto al condensador, es una de las partes de un microscopio que están construidas a partir de una combinación de lentes y que dirige hacia la muestra los rayos de luz que se emiten por la fuente de luz. Está situado entre la platina y la fuente de luz. Lo más normal es que los rayos de luz sigan trayectorias divergentes. Por ello, el condensador se vuelven un elemento importante para poder tener gran influencia sobre la calidad de imagen que obtendremos.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre las partes de un microscopio y cuáles son sus características principales.