El calentamiento global trae consigo temperaturas anormalmente altas. Hoy entra el otoño en el hemisferio norte a las 22:02 y comenzará con temperaturas altas. España se encuentra en un déficit de agua, incluso terminando el ciclo hidrológico.
Se espera que las lluvias no superen el déficit de agua, puesto que las previsiones de precipitaciones para los meses del otoño no son muy esperanzadoras. ¿Cómo será el otoño de 2017?
Más temperaturas y menos lluvias
Conforme pasan los años, las medidas de temperaturas son cada vez más altas. Los inviernos y los otoños son más suaves y con temperaturas más altas. Además, el régimen de precipitaciones desciende y no es suficiente para poder recuperar el agua gastada en los embalses de toda la península.
Aunque durante los meses de otoño se suele recoger un tercio de las lluvias anuales, de momento, las proyecciones climáticas prevén un octubre con menos lluvias. La falta de lluvias previstas para el mes de octubre incidirá sobre todo en áreas de Extremadura y del suroeste de Andalucía, y en menor medida en áreas del Mediterráneo.
Sin embargo, algo esperanzador vendrá en los meses de noviembre y diciembre, donde habrá más cantidad de lluvia. Las lluvias serán por casi toda España, siendo más intensas en País vasco y las Islas Baleares.
Otoño con más temperatura
Como se ha mencionado antes, se espera un otoño bastante cálido, con valores altos y anomalías entre 1 y 1,5 grados por encima de la media. Para el mes de noviembre, se esperan 9,9 grados de media (lo que es bastante cálido para toda España) y en diciembre con 8 grados de media, también bastante cálido.
El verano ha sido muy caluroso
En cuanto al verano que finalizará el viernes, ha sido el segundo más cálido desde 1965 y también del siglo XXI, por detrás del verano de 2003 en el que la temperatura media fue de 25 grados, quedando por encima de los veranos de 2015 y 2016, a los que ha superado en 0,2 y 0,5 grados, respectivamente.
En este verano se han superado bastantes récords de temperatura. Por ejemplo, en Córdoba se han registrado 37 días en los que la temperatura ha sobrepasado los 40 grados. Ya se veía venir esto cuando junio comenzó siendo extremadamente cálido, el más cálido desde 1965 con temperaturas medias de 3 grados sobre lo normal. Julio y agosto han superado las temperaturas medias por 1 grado.
Durante la época estival se produjeron tres olas de calor: la primera entre el 13 y 21 de junio, la segunda entre el 12 y 16 de julio, en ella se registraron las temperaturas más elevadas del verano, y la que discurrió entre los días 2 al 6 de agosto.
Entre las temperaturas más altas registradas en los días de olas de calor de julio, nos encontramos con 46,9 grados en Córdoba. Además, en 16 estaciones principales de toda España, la temperatura media de este verano fue la más alta de su serie desde 1920.
Lluvias durante este verano
Al menos, durante este verano se han registrado precipitaciones medias de 79 litros por metro cuadrado. Este valor es un 7% mayor que el promedio.
Fue húmedo o muy húmedo en el centro peninsular, País Vasco, La Rioja, Navarra y Aragón, seco o muy seco en zonas del sur peninsular, Cataluña, Galicia, oeste de Castilla y León, Canarias occidental, y extremadamente seco en una zona que abarca Andalucía occidental, sureste de Extremadura, pequeñas zonas entre Granada y Albacete y en Canarias occidental.
Aunque las lluvias en promedio hayan sido un 7% mayores de lo normal, no ha sido suficiente para compensar el déficit hidrológico. El ciclo hidrológico se cierra con un déficit del 12%. A más calor, más consumo de agua y más cantidad de evaporación del agua, por lo que la cantidad de agua embalsada se reduce drásticamente en todos los embalses de España.
Esperemos que las lluvias vuelvan y se puedan recuperar los embalses, ya que se encuentran en un estado cada vez más deprimente. Se deberían de comenzar las restricciones de agua en muchos lugares donde los embalses están por debajo del 30%.