El Atlántico Norte está siendo el escenario de un episodio meteorológico que ha captado la atención de los servicios meteorológicos de Europa. La borrasca Bert, bautizada por el Met Éireann, el servicio meteorológico irlandés, está en el centro de las miradas debido a su ciclogénesis explosiva, un fenómeno que ha convertido a este sistema de bajas presiones en una de las tormentas más notables de la temporada.
El término «bombogénesis» o «ciclón bomba» utilizado para describir este evento no es un invento mediático, sino que proviene de la comunidad científica. Este proceso ocurre cuando la presión central de una borrasca desciende bruscamente en un corto período de tiempo. En el caso de Bert, la presión ha caído 42 hPa en menos de 24 horas, situándose en 937 hPa, niveles típicos de huracanes de categoría 4. Tal desplome de presión genera una intensificación considerable de los vientos y de otros fenómenos asociados, dejando tras de sí una borrasca de impacto extremo.
Impacto inmediato en las islas británicas
El Reino Unido e Irlanda están recibiendo los primeros efectos de la potente borrasca Bert. Allí, se han activado alertas naranjas y amarillas por lluvias torrenciales, nieve y vientos huracanados. Escocia y el norte de Inglaterra están especialmente afectados, con acumulaciones de nieve que podrían superar los 40 cm en zonas altas y olas de hasta 12 metros que golpean las costas de manera constante. Las temperaturas también están en aumento debido al flujo cálido del sur que acompaña al evento.
¿Qué efectos tendrá en España?
Aunque la borrasca Bert no afectará directamente a España, su influencia no pasará desapercibida. Durante el domingo, un frente asociado a la borrasca tocará el noroeste peninsular, dejando lluvias y fuertes rachas de viento en regiones como Galicia, Asturias y el Cantábrico. Las precipitaciones más significativas se registrarán en Galicia, donde los acumulados podrían superar los 40 mm en 12 horas y las rachas de viento superar los 100 km/h en zonas expuestas.
En las zonas montañosas del norte, el viento alcanzará velocidades todavía mayores, superando los 140 km/h en algunos collados y cumbres. Además, la situación costera estará marcada por un fuerte oleaje con olas de entre 8 y 9 metros en las costas gallegas y del Cantábrico occidental.
Clima cálido y atípico para noviembre
Uno de los efectos menos habituales asociados a Bert es el incremento de las temperaturas en España. Mientras en Gran Bretaña y el Atlántico Norte se producen situaciones de frío extremo, en la península las temperaturas máximas estarán muy por encima de lo normal para esta época. Se prevén valores cercanos a los 25 °C en Andalucía, Extremadura y la costa mediterránea, mientras que en el Cantábrico se superarán los 20 °C. Este ambiente cálido se mantendrá durante buena parte de la próxima semana.
Qué esperar para los próximos días
El lunes, el frente asociado a Bert continuará su desplazamiento hacia el este, dejando lluvias más dispersas pero todavía presentes en el tercio norte y centro peninsular. Las zonas del sur y del Mediterráneo, sin embargo, quedarán al margen de estas precipitaciones. Este día, las temperaturas comenzarán a descender ligeramente, aunque todavía se mantendrán por encima de los valores habituales de noviembre.
A partir del martes, la influencia de Bert desaparecerá gradualmente, dando paso a un período de estabilidad atmosférica en gran parte del país, con predominio de cielos despejados y un anticiclón que bloqueará la llegada de nuevos frentes atlánticos. No obstante, se formarán algunos bancos de niebla matinales en el interior y la temperatura permanecerá anormalmente alta, especialmente en la mitad sur y en el área pirenaica.
Aunque Bert no impactará de manera directa en España, su influencia será notable en forma de lluvias, vientos y un incremento de temperaturas en varias regiones. Este episodio también nos recuerda lo impredecible y extremo que puede llegar a ser el clima en el Atlántico Norte.