El controvertido Impuesto al Sol que a excepción de Canarias afecta a toda España, quiere ilegalizarse desde Europa. Más allá del hecho racional de que el Sol no es propiedad de nadie, es algo que choca frontalmente en los tiempos que corremos. Y es que si queremos reducir el CO2, dejar paso a energías renovables, sostenibles y más saludables, España parece mirar hacia otro lado.
Para los muchos afectados de éste impuesto, la resolución irá llegando a medida que pase el año. Y es que antes de hablar de fechas, y de lo injusto que esto parece, realmente es bastante contradictorio. Recordemos que hace no mucho tiempo atrás (10 años), se incentivaba el poner placas fotovoltaicas. Muchos edificios nuevos, ya las tenían que traer instaladas. Y ahora, todos los que las tienen… hay que pagar! Evidentemente, el número de instalaciones de placas ha caído en picado. Pero, puede que las cosas cambien.
Europa se posiciona en contra del Impuesto al Sol
Europa prepara medidas para ir incentivando las energías renovables. Una de ellas, promovida por el ponente José Blanco del Parlamento Europeo, es aumentar la de las energías renovables y encontrar una cuota de mercado del 35% con el 2030 como máximo año. Un porcentaje más ambicioso que el de la propia Comisión Europea que lo sitúa en el 27%. Respecto a la gobernanza Europea Energética liderada por Claude Turmes y Michele Rivasi, se quedan ambas cortas, estos eurodiputados ya están proponiendo el 45%. En medio de todo este marco donde el incentivar las energías renovables parece ser algo que hay que hacer, se entiende que ciertas propuestas, deben ser ilegalizadas. Cómo el impuesto al Sol.
El 4 de septiembre, los eurodiputados de la Comisión Europea comentaran sobre las propuestas y presentarán su posición al plenario, tras una votación del Comité prevista para los días 11 y 12 de octubre. Más tarde, posiblemente a finales de año, el pleno presentará su voto.
Greenpeace, junto con sus recientes acciones como el Sol que se pintó en Barcelona, sigue pidiendo al Gobierno Español, que no se quede atascado en el pasado. Que promueva energías limpias y deje atrás las que nos están resultando más nocivas.