Dos representantes de la Comisión Europea han conocido sobre el terreno experiencias piloto en el Pirineo destinadas a anticiparse a los impactos del calentamiento. La visita ha servido para comprobar avances de PYRENEES4CLIMA tras una reunión técnica de tres días en Jaca, en la que participaron 46 entidades socias y se revisó el progreso de las acciones programadas para este año.
El objetivo de estas pruebas es transformar el conocimiento en decisiones prácticas, involucrando a quienes viven y trabajan en la montaña y ajustando cada medida al contexto local. Según la coordinación del proyecto y del Observatorio Pirenaico de Cambio Climático, liderada por Eva García‑Balaguer, la iniciativa impulsa una cooperación transfronteriza sin precedentes para acelerar la transferencia y réplica de soluciones.
Casos piloto: del bosque protector a nuevos cultivos
En Canfranc se evalúa la capacidad del arbolado para actuar como barrera natural frente a procesos de inestabilidad, como aludes o deslizamientos, una línea que se desarrolla en paralelo en Benasque y en el valle de Ossau (Pirineos Atlánticos) bajo la dirección de AECT‑Pirineos‑Pyrénées. Estas actuaciones ponen a prueba el papel de los bosques como barrera frente a aludes y deslizamientos y cómo gestionarlos frente a amenazas como incendios para reforzar la seguridad y la resiliencia.
En Biescas, otro piloto explora la diversificación agrícola con plantas aromáticas y frutales como alternativa para hacer frente a nuevos escenarios climáticos, coordinado por el CITA. Ensayos similares se despliegan en Ara (Jaca) y Ligüerre (Aínsa), con la vista puesta en ampliar ingresos agrarios, disminuir riesgos y aprovechar cultivos mejor adaptados a las condiciones futuras.
Agua y territorio: pactos locales y custodia
La gestión del agua es otro eje central. En el valle de Nay (Nouvelle‑Aquitaine), AUDAP impulsa un pacto local para promover un uso solidario del agua, equilibrando demandas urbanas, agrícolas y ambientales y reforzando la planificación con criterios de sostenibilidad y responsabilidad compartida.
En Hoz de Jaca, acuerdos de custodia del territorio promovidos por SEO/BirdLife comprometen a pequeños municipios pirenaicos con acciones de adaptación y conservación de hábitats sensibles, integrando a propietarios, administraciones y entidades sociales para proteger servicios ecosistémicos clave y especies amenazadas.
Seguimiento del proyecto y cooperación institucional
Durante la estancia, se celebró en Jaca la reunión formal de seguimiento ELMEN‑CINEA para revisar el estado de ejecución de PYRENEES4CLIMA. En el encuentro participaron las 46 entidades socias y contó con la presencia de Yann Hélary, secretario general de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos, y de Olvido Moratinos, presidenta de la comarca de la Jacetania.
La dirección del proyecto subrayó que la cooperación entre territorios y sectores es decisiva para cumplir objetivos europeos y escalar soluciones. Esta visión compartida pone el acento en una colaboración efectiva, basada en evidencia científica, que nutra políticas públicas y medidas concretas en el Pirineo.
Financiación, calendario y marco estratégico
PYRENEES4CLIMA fue aprobado por el programa LIFE en junio de 2023 y dispone de un presupuesto cercano a 20 millones de euros, con horizonte de trabajo hasta abril de 2031. Los recursos permiten combinar acciones de campo, seguimiento, formación y transferencia para acelerar la adaptación climática en la región.
Todas las actividades se alinean con la Estrategia Pirenaica de Cambio Climático (EPiCC), pionera en Europa por su enfoque transfronterizo y adoptada en 2021 por los siete territorios pirenaicos de España, Francia y Andorra. La EPiCC busca aumentar la resiliencia del sistema socioecológico, proteger el capital natural, como la fauna pirenaica, y el bienestar ciudadano, y reforzar la cooperación mediante innovación y compartición de conocimiento.
Con pilotos en marcha, alianzas locales y respaldo institucional y financiero, el Pirineo avanza en soluciones concretas para adaptar el Pirineo al cambio climático, combinando gestión forestal preventiva, nuevas prácticas agrarias, acuerdos sociales por el agua y mecanismos de gobernanza que faciliten su réplica a escala pirenaica.