El invierno es una de las estaciones del año durante las cuales el tiempo invita a ponerse ropa de abrigo y a disfrutar de los paisajes cubiertos por la nieve. Pero, ¿te has preguntado alguna vez por qué cuando nieva hace menos frío?, o ¿por qué silba el viento?
De estas y otras curiosidades vamos a hablar en este artículo. Descubre más sobre esta estación que acabamos de comenzar.
¿Por qué el viento genera un sonido?
Durante muchos días de invierno -y, realmente, de todo el año-, el viento puede soplar con bastante fuerza. Al hacerlo, si se encuentra con un obstáculo, por ejemplo, una persiana, producirá una pequeña aceleración ya que la zona de paso del aire en movimiento se estrecha.
¿Por qué cuando nieva hace menos frío?
Esto, aunque parezca que no, tiene una explicación científica, y es esta: los copos de nieve, que están formados por cristales de hielo, atrapan vapor de agua a medida que caen, y ese vapor se convierte en hielo. El paso del estado gaseoso (vapor de agua) al sólido (hielo) libera calor.
¿Por qué las noches despejadas invernales son tan frías?
Si eres aficionado a la astronomía, seguro que disfrutas con los magníficos cielos del invierno. Están despejados, se ven limpios,… pero hace un frío impresionante. ¿Por qué? Porque no hay nubes. El manto nuboso impide que la calor recibida durante el día, la radiación infrarroja, se disipe, y claro, si no hay nubes la radiación se pierde.
¿Cómo se calcula la sensación térmica?
La sensación térmica es el frío o calor que percibimos independientemente de la temperatura real. Esta diferencia térmica entre la piel y el medio ambiente viene determinada por la humedad ambiental, la velocidad y dirección del viento, la nubosidad, entre otros (encontrarás más información en este artículo). Así, por ejemplo, si el termómetro marca 10ºC, el cielo está despejado y no sopla viento, sentiríamos un poco de frío, 7,5ºC.
Que pases un buen invierno 🙂 .