Los cometas son cuerpos celestes que han intrigado a ser humano desde sus primeros avistamientos. Con la llegada de la ciencia, se podrán vender cuáles eran sus características y origen. Con el paso del tiempo se puede saber la trayectoria de los cometas y ver qué amenaza representan. Son muchos los cometas del sistema solar que tienen su trayectoria y podemos visualizar los todos los años.
En este artículo vamos a enseñarte cuáles son los nombres de los cometas del sistema solar y qué características tienen.
Características de los cometas del sistema solar
Dentro del Sistema Solar, donde se encuentra la Tierra, los cometas son entidades celestes que siguen trayectorias orbitales. Estos objetos luminosos son restos del inicio de nuestro sistema hace aproximadamente 4.600 millones de años, cuando el colapso de la nebulosa solar provocó la aparición de numerosas protoestrellas.
La composición de estas formaciones consiste en un núcleo formado por hielo seco congelado, agua, roca y otras sustancias diversas como amoníaco, metano y ciertos metales, los cuales permanecen sólidos debido a temperaturas extremadamente bajas.
A medida que estos cuerpos celestes se acercan al Sol y experimentan un aumento de temperaturas, el hielo dentro de su núcleo se transforma en gas, lo que resulta en la formación de una coma o atmósfera similar a un cabello. Esta atmósfera se expande gradualmente y, impulsada por su propio movimiento y el viento solar, se dirige hacia el Sol y finalmente se transforma en una cola.
En 2014, los investigadores hicieron un hallazgo notable durante la misión de la sonda Rosetta: los cometas, en su viaje celeste, emiten sonidos audibles. Sin embargo, estos sonidos no son perceptibles para el oído humano, ya que se manifiestan como oscilaciones del campo magnético con una frecuencia de aproximadamente 40-50 milihercios.
Las dimensiones de los cometas
En términos de dimensiones, el núcleo suele medir unos 10 kilómetros de diámetro de media, aunque en determinados casos puede expandirse hasta 50 kilómetros. Por el contrario, la cola tiene el potencial de extenderse millones de kilómetros.
A medida que se acerca al Sol, el tamaño del objeto puede variar mucho, lo que lo hace de naturaleza muy variable.
Existen seis tipos de clasificaciones en función de su tamaño:
- La detección de cometas enanos plantea un desafío importante debido a su núcleo extremadamente pequeño, que mide menos de 1,5 kilómetros.
- El núcleo de un cometa pequeño suele tener un tamaño de entre 1,5 y 3 kilómetros.
- Un cometa de tamaño mediano suele tener un diámetro de núcleo que oscila entre 3 y 6 kilómetros.
- El núcleo de un cometa grande suele tener un diámetro de entre 6 y 10 kilómetros.
- El diámetro del núcleo de un cometa gigante suele oscilar entre 10 y 50 kilómetros.
- El diámetro del cometa Goliat supera los 50 kilómetros.
Órbitas y periodos
Las órbitas de los cometas exhiben una forma elíptica y se clasifican en ciclos cortos, medianos o largos según su duración, como describimos a continuación:
- Un ciclo corto se refiere a un período de tiempo inferior a 20 años.
- El ciclo medio se sitúa dentro del rango de 20 a 200 años.
- Un ciclo largo se refiere a un período que supera los 200 años y, en algunos casos, estos ciclos pueden extenderse por miles de años.
El origen de un cometa se puede inferir en función de su órbita, lo que da lugar a especulaciones. Se cree que los cometas de ciclo corto se originan en el cinturón de Kuiper, mientras que los cometas de período largo provienen de lugares más remotos como la Nube de Oort.
¿Existen otras formas de entidades celestiales?
La inmensidad del universo abarca una cantidad incalculable de elementos, tan vastos que nuestro conocimiento de ellos es sin duda incompleto. Estos elementos, conocidos como cuerpos celestes, residen más allá de los confines de nuestro planeta, en la extensión del espacio exterior.
Además de los cometas, en la inmensidad del espacio conviven cuerpos celestes como estrellas, planetas, satélites, asteroides y meteoritos. Si bien algunos pueden parecernos similares tras una observación inicial, sus características únicas los distinguen, colocándolos en una categoría distinta. Ejemplos de estas características incluyen su tamaño, composición, posición, trayectoria y el tipo de atmósfera que poseen.
Cometas del sistema solar que son famosos
Cometa Halley
Uno de los cometas más famosos y ampliamente investigados es el cometa Halley. Este cometa en particular tiene un ciclo corto, con un promedio de alrededor de 76 años en su órbita. Lo que lo distingue es su órbita retrógrada, lo que significa que se mueve en dirección opuesta a la de los planetas. El descubrimiento del cometa Halley se puede atribuir a Edmund Halley en 1705, quien utilizó las leyes de Newton para comprender su naturaleza periódica. De cara al futuro, se espera que la próxima vez que el cometa Halley alcance su punto más cercano al Sol (perihelio) será en 2061.
Cometa Nishimura
El último cometa que se acercó a nosotros, el cometa Nishimura, ha entrado ahora en nuestro campo de visión desde la Tierra. Revelado el 11 de agosto de 2023, este objeto celeste se encuentra actualmente en trayectoria hacia la órbita de nuestro Sol. La NASA advierte que pronosticar con precisión su comportamiento es una tarea insuperable debido al potencial de que su núcleo se fracture durante su aproximación a nuestra estrella.
Cometa ZTF
El cometa ZTF, conocido como el «curioso cometa verde», tuvo un encuentro cercano con Júpiter y tiene un período orbital notablemente largo de 50.000 años, lo que indica que no se ha acercado a la Tierra desde la era del Paleolítico superior.
Cometa Hale-Bopp
El cometa Hale-Bopp, aunque no llega a los 50 kilómetros, es ampliamente considerado como un cometa colosal, ya que mide unos impresionantes 40 kilómetros de tamaño. Revelado al mundo en 1995, adornó nuestros cielos durante un período prolongado y permaneció visible durante varios meses consecutivos. Sin embargo, pasará un asombroso lapso de más de 2.000 años antes de que realice su próximo encuentro cercano con la Tierra.
Cometa Shoemaker-Levy
En 1993, el descubrimiento del cometa Shoemaker-Levy presentó una oportunidad única para que la humanidad fuera testigo de una colisión en vivo entre cuerpos celestes, ya que trágicamente desapareció en una colisión con Júpiter apenas un año después.
Espero que con esta información puedan conocer más sobre el nombre de los cometas del sistema solar y sus características.