Una fuerte caída de las temperaturas pudo haber tenido el protagonismo para el desenlace del Imperio Romano. Así lo recogió un estudio realizado por los científicos del proyecto «Past Global Changes». Sus investigaciones fueron recogidas y publicadas en la revista Nature Geoscience. Y no solamente en la antigua civilización romana, sino muchas más civilizaciones a lo largo de la historia.
Es curioso pues, a menudo las películas y un desconocimiento natural por no haber vivido las antiguas épocas pasadas, nos llevan a pensar que las reorganizaciones de las antiguas civilizaciones obedecen a muchos otros factores. No se suele caer en la cuenta de que, el clima, influye de forma muy directa en todos los seres vivos. En nuestro caso, no hemos sido una excepción. Aunque a menudo se tienda a olvidar del papel determinante que juega la climatología imperante en cada uno de los momentos.
Las causas y las consecuencias del enfriamiento
El periodo del cual se data comprende entre el año 536 d.C. y el 660. Los efectos de este enfriamiento pudieron sentirse en amplísimas zonas, que provocó trastornos políticos, transformaciones sociales e incluso caídas de imperios desde Europa hasta Asia, e incluso parte arábica. Esta edad de hielo de larga duración, fue provocada por la gran erupción de varios volcanes. El primero de ellos en el 536, el segundo en el 540 y finalmente en el 547. Para entender mejor cómo el clima puede alterar la historia, es interesante revisar los grandes cambios climáticos en la historia de la Tierra.
El enfriamiento climático producido por los volcanes se debe a las grandes expulsiones de pequeñas partículas, los aerosoles de sulfato. Éstas entran en la atmósfera bloqueando la luz del Sol. El proceso bloqueante que impide entrar la luz solar por la refracción de ésta ha sido estudio en la actualidad para dar solución al calentamiento global. Por parte de la Universidad de Harvard existe también un proyecto de geoingeniería llamado Scopex cuyo objetivo es el enfriamiento intencionado mediante esta técnica.
Otro de los efectos que se vivieron fue la plaga de la pandemia de Justaniano que se extendió por el Mediterráneo entre los años 541 y 543. Llegó hasta Constantinopla y fue la responsable de cobrarse la vida de millones de personas incluso siglos más tarde. Lo que nos enseña que el papel del clima ha sido decisivo en la evolución de nuestra civilización incluso en tiempos relativamente recientes. Además, el impacto del cambio climático en la biodiversidad es un tema que no debemos subestimar, tal como se menciona en el artículo sobre cómo la reducción de aves migratorias en España está relacionada con estos cambios.