Cambio climático y DANAS: un fenómeno meteorológico en auge

dana

El concepto de cambio climático ha evolucionado desde una simple frase a una acuciante crisis global. En las próximas décadas, se prevé que los fenómenos meteorológicos extremos se intensifiquen en severidad, con sequías, olas de calor, noches tropicales y lluvias torrenciales que se intensificarán en el futuro.  Además, se prevé un aumento de huracanes importantes en la cuenca atlántica. Sin embargo, España no sufre huracanes, sino que se ve afectada por fenómenos comúnmente conocidos como gotas frías, que técnicamente se identifican como DANA (depresiones aisladas en niveles altos).

En este artículo vamos a contarte los nuevos descubrimientos acerca del cambio climático y el aumento de las DANAS en España.

Aumento de las DANAS a causa del cambio climático

cambio climatico y dana

Surge una pregunta: si numerosos fenómenos extremos se intensifican en los próximos años, ¿podrían ser más graves las consecuencias de las DANA cuando se manifiesten? Además, ¿qué es exactamente una DANA o gota fría y qué procesos conducen a su formación?

En la troposfera, la capa atmosférica donde tienen lugar los fenómenos meteorológicos, existe un patrón de circulación que puede dar lugar al desarrollo tanto de depresiones como de anticiclones. Las tormentas se caracterizan por condiciones meteorológicas inestables, que incluyen precipitaciones y nubosidad. Estas tormentas tienen el potencial de originarse tanto en la superficie como a mayores altitudes, específicamente dentro de las capas superiores de la atmósfera.

Una DANA se identifica cuando una tormenta, o depresión, se desarrolla a altitudes elevadas y se desprende de la circulación atmosférica circundante, lo que es el origen de su denominación. Por lo general, estas tormentas a grandes altitudes atrapan aire más frío dentro de las capas superiores de la atmósfera. El movimiento de este aire frío a través de una superficie más cálida da como resultado una interacción entre masas de aire caracterizadas por temperaturas y niveles de humedad variables, que a menudo culminan en el desarrollo de tormentas intensas que con frecuencia producen fuertes lluvias, a veces de naturaleza torrencial.

Cambios de temperatura en el mar Mediterráneo

dana en españa

El mar Mediterráneo proporciona el componente esencial necesario para el desarrollo de tormentas severas y fuertes lluvias. Las aguas más cálidas presentes al final del verano sirven como catalizador de tormentas y lluvias torrenciales cuando se produce un evento DANA.

Es importante tener en cuenta que la temperatura del mar en las costas mediterráneas españolas ha aumentado 0,8ºC en el último siglo, observándose un aumento notablemente acelerado desde 1980.

Este fenómeno implica una acumulación gradual de calor durante los meses de primavera de mayo y junio, que persiste durante todo el verano y se extiende hasta bien entrados los meses de otoño de octubre y principios de noviembre.

Según las proyecciones sobre el cambio climático para las próximas décadas, se prevé que la temperatura del Mediterráneo persistirá en su tendencia ascendente. Este aumento facilita la formación de nubes de tormenta y permite que las precipitaciones se concentren más en duraciones más cortas, lo que puede dar lugar a cantidades de precipitación que oscilan entre 100 y 200 litros por metro cuadrado en una sola hora.

De hecho, todo indica que la aparición de estas DANA o gotas frías puede dar lugar a efectos y consecuencias notablemente más intensas y graves.

Distinciones entre DANA, gota fría y tormenta

inundaciones por cambio climatico

Aunque comúnmente se perciben como eventos meteorológicos distintos, los términos DANA y gota fría son, en esencia, casi idénticos. Una gota fría se define como una «masa de aire que desciende desde una corriente significativamente fría sobre una masa de aire más caliente, dando lugar a importantes perturbaciones atmosféricas», como se indica en el diccionario académico.

Del Campo explica que el término «gota fría», ampliamente reconocido, se deriva de una traducción casi literal del concepto introducido por la escuela alemana, que lo designó como kaltlufttropfen, que se traduce como «gota de aire frío». Sin embargo, el término «gota fría» ganó una popularidad significativa en España durante la década de 1980 y se asoció a cualquier caso de lluvia intensa, independientemente de la participación de una DANA.

En cambio, una tormenta representa un fenómeno completamente distinto: es una tempestad que se produce a escala local. Este tipo de tormenta es generada por nubes cumulonimbus, que presentan un desarrollo vertical sustancial y son responsables de descargas eléctricas atmosféricas que se manifiestan como rayos visibles. La expresión audible de estas descargas se percibe como truenos.

Según datos de AEMET, los sistemas de nubes típicos generadores de tormentas cubren un área de aproximadamente 10 kilómetros cuadrados y duran aproximadamente una hora. Del Campo aclara: “Ciertamente, una DANA promueve el desarrollo de tormentas; sin embargo, dichas tormentas también pueden manifestarse independientemente de una DANA”.

¿Están ocurriendo con mayor frecuencia en la actualidad?

Las DANA se manifiestan típicamente al sur de la corriente en chorro responsable de su formación, una región que incluye España. Un estudio realizado el año pasado por la Sociedad Meteorológica Americana reveló un aumento global en la ocurrencia de DANA desde la década de 1960. Según del Campo, “En el hemisferio norte, Las zonas más propicias para la llegada de DANA son el sur de Europa, la costa este de Estados Unidos, la región China-Siberia, el noreste del Pacífico y el noroeste de Norteamérica. En cambio, en el hemisferio sur predominan sobre todo Australia y Nueva Zelanda, así como el extremo sur de Sudamérica y el sur de Asia”.

En España, el clima histórico está marcado por episodios de lluvias torrenciales, que han provocado con frecuencia inundaciones catastróficas en diversas regiones y periodos. Del Campo explica que “las DANA son parte integral de nuestro clima ambiental y a menudo han sido responsables de problemas asociados a las fuertes lluvias. Sin embargo, la ocurrencia de precipitaciones intensas no está garantizada cuando una DANA está cerca, ya que depende de factores adicionales como su posición y la disponibilidad de aire húmedo en la superficie”.

En los últimos años, la región mediterránea ha experimentado importantes fenómenos meteorológicos extremos atribuidos a la influencia de grandes DANA que se acercan a las zonas sur y este de la península. Según del Campo, “algunos estudios sugieren que en los días de más lluvias llueve más ahora que en décadas pasadas”. Esto indica que las lluvias torrenciales han sido cada vez más intensas, fenómeno que se ha notado especialmente en localidades del litoral mediterráneo peninsular.

Espero que con esta información puedan conocer más sobre el aumento de las DANAS a causa del cambio climático en España.


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