En estos momentos puede parecer un idea un tanto ambiciosa, pero parece ser que hay muchas probabilidades de que se convierta en una realidad si nadie lo impide: el Govern del archipiélago podría prohibir los coches diésel a partir del año 2025 gracias a un anteproyecto de ley que afectaría tanto a las nuevas matriculaciones como a los coches de alquiler y a los visitantes que lleguen a las islas con su vehículo por transporte marítimo.
Con todo, esperan tener un 90% menos de misiones para el año 2050, algo que sin duda es muy interesante teniendo en cuenta que la central térmica del archipiélago, la del Murterar que se encuentra en Alcúdia (Mallorca), causa al año 54 muertes prematuras tal y como informó el Diario de Mallorca.
En los últimos años, especialmente a partir del 2016, la flota de vehículos en las Islas ha ido in crescendo. Vehículos, en su inmensa mayoría diésel, que no sólo son circulados por personas que quieren pasar unas buenas vacaciones, sino que ademán emiten gases que contaminan el aire que respiran todo el año los residentes. Para evitar que la situación empeore, lo que se hará será luchar contra el cambio climático prohibido los coches que funcionen con diésel.
Pero además, se espera ir cerrando la central de Es Murterar poco a poco: el grupo 1 y 2 en el 2020, y el grupo 3 y 4 en el 2030. Pero esto no es todo: se prevé sustituir el alumbrado público, y la instalación de placas solares en aparcamientos y en nuevas naves. En el caso de isla de Formentera, podrá también limitar el número de coches que llegan en verano, pues se trata de una isla más bien pequeña por la que circulen, en agosto, unos 50.872 vehículos al día.
El problema es que es el gobierno central, el de Madrid, quien tiene la última palabra. Y tras el rechazo al cierre de Es Murterar, quién sabe lo que puede ocurrir.